Las direcciones nacionales de IU y Podemos desgranaron este martes en Madrid parte de los detalles que no quisieron desvelar la noche del lunes, cuando oficializaron su alianza, entre ellos uno decisivo para la coalición que lidera Alberto Garzón: qué recompensa en forma de posiciones con opciones reales de escaño recibirá por dar el sí a la concurrencia común a las urnas. Resuelto el misterio, Izquierda Unida tendrá en toda España trece puestos en posiciones relevantes, que de repetirse los resultados del 20D se traducirían en 8 escaños. De ellos, cuatro se podrían decidir en Andalucía. Además, se haría con un senador.
IU ha logrado colocar en esas listas comunes a sus representantes en el número 2 por Málaga y Córdoba, y al número 3 por Sevilla y por Cádiz. Con los resultados de Podemos el 20D, tan sólo estaría asegurado el representante de la capital de la Costa del Sol, pero la confluencia maneja otros datos más optimistas. Sus esperanzas de éxito, las mismas que han alentado la unión de ambas fuerzas, no son otras que volver a cosechar en las urnas una marca igual o superior a la que lograron por separado hace cuatro meses. Traducido, confían en arañar al menos los 1.005.000 votos de entonces (749.081 Podemos y 256.080 IU) que se tradujeron en 10 escaños para los de Pablo Iglesias y ninguno para sus ahora aliados de Garzón.
Con ese nuevo listón, que superaría el millón de papeletas, la unión de la izquierda confía en arañar esos cuatro escaños en la región que más sillones de la Cámara Baja reparte: 61. Claro que hay factores en contra, entre ellos la duda del efecto que tendría sobre unos y otros la previsible alta abstención que se augura o las maldades de la Ley D’Hont, que a menos participación suele premiar a los partidos hegemónicos, en este caso PSOE y PP.
Otra cosa es lo que ocurriría si la alianza se aplicase a los resultados exactos del 20D. Si Podemos e IU hubiesen concurrido unidos a esa cita electoral, posibilidad que se barajó pero se vio frustrada, habrían arrebatado al PP un escaño en Granada y otro en Málaga, mientras que el PSOE habría perdido uno en Sevilla y otro en Jaén. Ambos partidos, socialistas y populares, ya han reconocido que temen que la confluencia atrape los “restos”, los flecos de votos que dan los últimos escaños.
Sonora dimisión en Podemos Jaén
La secretaria general de Podemos Jaén, Trinidad Ortega, dio este martes un sonoro portazo a la formación presentando su dimisión por carta con duros ataques a la líder en Andalucía, Teresa Rodríguez. Tras denunciar sentirse “acosada” y haberlo denunciado a la Policía, acusó a ésta de colocarla en una “lista negra” y maniobrar para expulsarla del partido.