El número de librerías en el conjunto de la comunidad autónoma andaluza ha sufrido en el último lustro una caída cifrada en alrededor de un 36 por ciento, pasando de las alrededor de 1.400 existentes en 2010 a las casi 900 que hay en la actualidad.
Así lo ha precisado hoy en rueda de prensa en Huelva el presidente de la Federación Andaluza de Libreros (FAL), Juan García Villadeamigo, quien ha indicado que el cierre de establecimientos se ha producido, principalmente, por "la caída de las ventas".
"La crisis nos ha afectado sobre manera, las familias que tienen dificultades para llegar a final de mes no piensan en comprarse un libro, que, de una forma u otra, es un artículo de lujo", ha manifestado.
Asimismo, ha apuntado que en conjunto de la comunidad hay provincias que están presentando un mejor comportamiento que otras, como es el caso de la Huelva, donde el sector "está resistiendo mejor que en otros territorios".
Pese a la situación actual Villadeamigo ha subrayado que el sector es "como el Titanic, pero no se hunde".
También se ha referido a otros formatos como el libro electrónico que, en su opinión, "no le hace competencia al libro en papel, no es compatible con él ya que se concibe más como una herramienta de trabajo".
Según ha señalado las ventas de libros electrónicos llevan "estancadas desde hace diez años" y además "es muy difícil saber cuál es su uso o qué tipo de libros se leen, pues el 95 por ciento de lo que se lee en ellos proviene de descargas ilegales".