Las mismas fuentes confirmaron que no hubo daños personales y que el propio dueño del negocio salió corriendo detrás de los autores del robo sin éxito para tratar de recuperar el dinero.
Hasta el cierre de esta edición, no se había producido ninguna detención. La crisis ha traído consigo una proliferación de estos establecimientos, que ya se encuentran en el punto de mira de los atracadores, después de que muchos jerezanos decidan empeñar sus joyas para intentar llegar a fin de mes.
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