El tablero político nacional, y el andaluz, se solaparán en apenas unas semanas por caprichos (o no) del calendario. Casualidad, como lo define el PSOE andaluz, o jugada ensayada de antemano, Pedro Sánchez se someterá en Madrid a su primer intento de ser investido presidente del Gobierno el 2 de marzo, la misma jornada en la que está previsto que Susana Díaz defienda su gestión en el Parlamento autonómico en el esperado debate sobre política general que la oposición había reclamado desde hacía meses. Habrá discursos en paralelo a kilómetros des distancia y puede que incluso a la misma hora.
Por si fuera poca coincidencia, todo eso ocurrirá justo después del 28F, una fecha simbólica en Andalucía que el PSOE-A quiere convertir este año, más que nunca, en una reivindicación de aquella conquista que fue “la igualdad para todos”. En “tiempos muy difíciles” por la arremetida del independentismo, en palabras del secretario de Organización del partido, Juan Cornejo, los socialistas se movilizarán en torno a la campaña #YosoyAndalucía para refrendar, como en los 80, que “no puede haber ciudadanos de primera y de segunda”.
El trasfondo es más complicado y tiene siempre a Podemos en el punto de mira. Según los plazos confirmados ayer, y siempre que Sánchez sea capaz de cerrar un acuerdo de Gobierno, la militancia socialista podría ser llamada a consulta un día antes, el 27. Y ahí el PSOE-A tiene clara su posición: si Podemos insiste en la línea roja del referéndum, como confirmó ayer, la respuesta a cualquier posibilidad que implique ir de su mano debe ser un rotundo no.
Tan claro está que el PSOE-A quiere ver a los de Teresa Rodríguez retratarse en público sobre la unidad territorial. Cornejo avanzó que su partido impulsará una moción en “todos los ayuntamientos y diputaciones” contra el “separatismo” y a favor de reafirmar que la soberanía corresponde “al conjunto del pueblo español". Sin nombrarlo, el órdago está dirigido a Podemos, que deberá aclarar en público su posición.
Los socialistas niegan que conocieran hasta ayer la fecha de la investidura y cualquier intención de Díaz de influir en Sánchez. Sin embargo, todo ello, más los mensajes que se lancen el 28F y la consulta, se entremezclarán en apenas cinco días.
Las advertencias se extienden al PNV
Además de alertar contra la “provocación” que implica que Podemos se reafirme en el referéndum catalán, Cornejo alertó ayer sobre un viejo conocido que también ha desvelado sus cartas para pactar. El PNV, que el pasado fin de semana propuso “romper la caja de la Seguridad Social” y resucitar “el plan Ibarretxe”, queda también señalado como un peligro.