El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha garantizado este sábado ante el Comité Federal, el máximo órgano del partido entre congresos, que no le preocupa su futuro y que no será presidente a cualquier precio: "No ambiciono un sillón, sino unos ideales que explican por qué me afilié al Partido Socialista. Me dedico a la política no porque me preocupe mi futuro, sino el de los españoles".
En un discurso de media hora en el que ha marcado las líneas de actuación que emprenderá a partir de ahora, Sánchez no ha hecho, sin embargo, ninguna referencia directa al 39 congreso que el PSOE ha acordado este sábado celebrar a finales de mayo ni a las discusiones internas que han protagonizado los 'barones' socialistas en las últimas horas a cuenta de los plazos para elegir a la dirección del partido para los próximos cuatro años.
El secretario general ha preferido centrarse en poner de manifiesto las razones que le van a marcar en las decisiones que tome de ahora en adelante, sobre todo de cara a la audiencia que mantendrá el próximo martes con el Rey y ante la posibilidad de que éste le ofrezca presentarse a la investidura.
De este modo, ha asegurado que él no ambiciona "un sillón" y que no será "presidente a cualquier precio", sino que aspira a defender los mismos "valores" que en su día marcaron anteriores gobiernos socialistas, mencionando así a los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González.
ENSALZA A TODOS LOS 'BARONES'
Y, en este sentido, también ha enumerado a todos y cada uno de los 'barones' socialistas que actualmente gobiernan en distintas comunidades autónomas. Así, ha mencionado directamente a la andaluza Susana Díaz, el asturiano Javier Fernández, el extremeño Guillermo Fernández Vara, el aragonés Javier Lambán, el castellano-manchego Emiliano García Page o la balear Francina Armengol. Pero también ha dedicado unas palabras a "tantos hombres y mujeres" dentro del PSOE que "se han dejado la piel para hacer un país mejor".
Eso sí, Sánchez se ha comprometido a que todas las negociaciones que emprenda para una posible investidura, si así se lo encarga el monarca, se harán "con luz y taquígrafos". "Que nadie se preocupe, que tendrá todos los filtros y todas las garantías posibles", ha afirmado, para después anunciar que cualquier pacto será consultado tanto al Comité Federal como a la militancia del partido.
Por todo ello, el secretario general ha reclamado el apoyo de los socialistas de cara a los próximos días y también que el PSOE salga de este Comité Federal, que ha calificado de "trascendente" por el momento que vive el país, siendo un partido unido.
"Os pido que salgamos de aquí como lo que somos, que demostremos a la gente que el PSOE es uno. Un partido que ante la encrucijada en que se encuentra el país da un paso al frente. Estamos para transformar una vez más España. Lo hicimos dos veces y lo vamos a hacer una tercera", ha aseverado.