Ante una rehabilitación de vivienda, una hipoteca, la compra de un coche y demás gastos importantes a afrontar hay dos soluciones: o bien se dispone del suficiente dinero ahorrado o hay que acudir al banco a solicitar un préstamo. Sin embargo, cuando son necesarias pequeñas cantidades para gastos cotidianos es mucho más sencillo acudir a los conocidos como préstamos rápidos, eso sí, siempre que lo ofrezcan empresas de garantía. No es de extrañar, por lo tanto, que esta fórmula haya triunfado estas navidades como la principal forma de disponer de dinero para las fiestas.
La Unión de Consumidores de Andalucía estimaba que los hogares preveían gastar
un 3% más en las navidades de 2015 respecto a las de 2014, hasta casi 444 euros. Aquí es donde está la diferencia. Pedir 500 euros al banco conlleva unos trámites demasiado farragosos ante la alternativa que ofrecen las empresas de créditos rápidos.
El incremento de los créditos rápidos se explica por varios factores clave. Para préstamos pequeños, los bancos no pueden competir con estas empresas que ofrecen: rapidez de recepción, transacción 100% online, y que puede llegar hasta los 1.500 euros. Si para un crédito tan pequeño el banco requiere días de burocracia, en las empresas de créditos rápidos
la agilidad marca la diferencia, en dos minutos se puede saber si se concede el préstamo, y en 15 minutos se podrá disponer del dinero en la cuenta del cliente.
Según la encuesta sobre Endeudamiento Familiar realizada en verano de 2015 por Facua, el 53 % de los consumidores tiene financiado con un préstamo la vivienda habitual, seguido de la compra de un coche (21,9 %), bienes de consumo general, como electrodomésticos o muebles (19,7 %), un apuro económico (18,3 %) o productos como una segunda vivienda, garaje y trastero (11 %). Pero de los grandes préstamos personales, casi el 60%, eran para la compra de vehículos y reformas en el hogar, según
Laboral Kutxa, un ejemplo de cómo la banca ha intentado abarcar el mercado de los créditos a particulares.
Pero no sólo las Navidades, ahora que han comenzado las rebajas, muchos compradores recurren a la fórmula del crédito rápido para aprovechar esta temporada. Un hogar con cuatro miembros gastará una media de 312 euros
según la Unión de Consumidores y el número de familias que prefieren la fórmula del préstamo rápido a la de tirar de tarjeta de crédito se incrementa cada año como alternativa más sencilla y cómoda.