Un total de 28 provincias estarán este sábado, 21 de noviembre, en alerta por frío, nevadas, lluvias, fuertes rachas de viento y olas, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología.
En concreto, estarán en aviso amarillo (riesgo) por olas Almería, Granada, Cantabria, Melilla, Alicante, Castellón, A Coruña, Lugo, Pontevedra, Vizcaya, Guipúzcoa y Asturias; mientras que tendrán activada la alerta naranja (riesgo importante) las provincias de Girona, Tarragona, Ibiza, Formentera, Mallorca y Menorca.
Además, Navarra, Guipúzcoa, Cantabria y Asturias tendrán activado el aviso amarillo por lluvias; estás dos últimas estarán en alerta también por nevadas junto a las provincias de Huesca, Burgos, León, Palencia, Soria, Lleida, Navarra, Lugo, La Rioja y Álava. Por otra parte, Huesca y Lleida tendrán activada la alerta amarilla por temperaturas mínimas que pueden llegar a -6ºC.
Por fuertes rachas de viento, estarán en alerta amarilla Almería, Teruel, Zaragoza, Guadalajara, Segovia, Melilla, Madrid, Navarra, Ibiza, Formentera, Mallorca y Menorca. Por su parte, tendrán activa la alerta naranja Huesca, Girona, Lleida, Tarragona, y Castellón, donde se esperan rachas máximas de hasta 100 kilómetros por hora.
De este modo, se esperan precipitaciones persistentes en el área cantábrica, el norte de Navarra y el Pirineo occidental, las cuales se extenderán, de forma más débil, principalmente a los sistemas montañosos del resto de la mitad norte peninsular y al este de Baleares. Además, habrá intervalos nubosos, en general, en la mitad sur con posibilidad de algunas precipitaciones débiles y dispersas, más probables en el Sistema Penibético.
La menor probabilidad de precipitaciones se dará en el extremo suroeste peninsular y el litoral mediterráneo, donde podrá estar en ciertos momentos poco nuboso. En Canarias, nuboso en el norte de las islas de mayor relieve, sin descartar alguna lluvia débil.
Respecto a la cota de nieve, se situará en la Península en el entorno de los 2.000 a 2.500 metros inicialmente, bajando a lo largo del día a 700 y 900 metros en la Cordillera Cantábrica y los Pirineos y a unos 1.000 metros en el Sistema Central e Ibérico.
Las temperaturas sufrirán un descenso generalizado, que podrá ser notable en zonas altas y en el interior de la mitad este peninsular. Las heladas se esperan en zonas de montaña de la mitad norte peninsular y en áreas próximas, pudiendo ser fuertes en Pirineos.
Finalmente, los vientos soplarán de componente oeste girando al norte en la Península y Baleares, con intervalos de fuerte en los litorales de Galicia, del cantábrico y en zonas de montaña e incluso rachas muy fuertes en el bajo Ebro y en el Ampurdán. En Canarias, los vientos soplarán del noreste.