La Policía Nacional ha detenido en Lleida a cinco integrantes de una banda que robó supuestamente unos 110.000 euros en seis atracos con violencia a varios ancianos y personas especialmente vulnerables y en hurtos en joyerías en seis ciudades españolas.
Según ha informado la Dirección General de la Policía en un comunicado, los arrestados -tres hombres y dos mujeres- actuaban de manera itinerante y con una total especialización en sus tareas, y se les achacan robos en bancos y joyerías de Madrid, Alcalá de Henares, Motril (Granada), El Puerto de Santa María (Cádiz), Gijón y Lleida
Elegían a sus víctimas en establecimientos como joyerías o sucursales bancarias y, en ocasiones, pinchaban las ruedas del coche de las víctimas para distraerlas y hurtar bolsos y objetos de valor del interior del vehículo.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de las denuncias de varias personas a las que habían robado en diferentes provincias españolas.
Durante las primeras pesquisas, los agentes averiguaron que se trataba de la misma organización que actuaba por todo el territorio nacional de forma itinerante.
El modus operandi variaba en función del objetivo: una o dos mujeres entraban en la sucursal bancaria observando a los diferentes clientes y movimientos de dinero que realizaban en su interior y seleccionaban a una persona que hubiera retirado una gran cantidad de dinero para, en el momento en el que saliera, avisar al resto de integrantes y asaltarle para robarle.
Otra de las prácticas más comunes era elegir a personas que habían estacionado su vehículo para operar en algún banco, a las que pinchaban una de las ruedas del coche, obligándoles con ello a estacionar de nuevo y bajarse del mismo.
Aprovechaban ese momento para distraer a las víctimas y sustraer bolsos y objetos de valor del interior del vehículo.
En ocasiones, en lugar de entidades bancarias, el objetivo del grupo eran joyerías, donde los integrantes de la banda actuaban al descuido: una pareja distraía al dependiente del establecimiento y otra aprovechaba ese momento para hacerse con joyas o relojes de alta gama.
Los agentes tuvieron conocimiento de que el grupo se iba a desplazar hasta el noreste de España para cometer robos y, fruto del dispositivo para prevenir estos delitos, los investigadores consiguieron detener a los cinco miembros del grupo cuando acababan de sustraer el bolso de una mujer que se encontraba en su vehículo y que había retirado 3.855 euros en efectivo de una sucursal bancaria en Lleida, que fueron devueltos a su propietaria.
Los arrestados ya habían sido detenidos en otras ocasiones en España con nombres y nacionalidades de diferentes países, y en el momento de su último arresto llevaban pasaportes, cartas de identidad y carnés de conducir de México.
En otras ocasiones, la documentación falsa utilizada era de Guatemala, Venezuela y Cuba.
Los agentes les han incautado nueve teléfonos móviles, un vehículo y el material con el que los arrestados presuntamente cometían sus asaltos: punzones, herramientas afiladas y puntiagudas, ropas y disfraces.
Además del hurto en Lleida, se les imputan otras cinco sustracciones más: una de ellas en Madrid, cuando una de las arrestadas sustrajo en una sucursal bancaria un billete de 500 euros al descuido cuando la empleada se ausentó del mostrador.
Otro hurto fue cometido en una joyería de Motril de la que se llevaron varias mantas con joyas valoradas en 45.000 euros, mientras dos parejas entretenían a sus trabajadores.
Utilizando el mismo procedimiento efectuaron presuntamente un hurto por valor de 18.000 euros en otra joyería de El Puerto de Santa María, sustrajeron dos cajetines de un cajero automático de un banco de Gijón con 40.600 euros y asaltaron con violencia a una mujer a la salida de un banco en Alcalá de Henares para robarle 3.000 euros en efectivo.