Una plataforma colaborativa de envíos locales a través de una aplicación móvil, Happy Box, ideada por un grupo de malagueños, se compromete a entregar paquetería pequeña desde un punto a otro de una ciudad en menos de una hora.
Además, se marca como objetivo dar una oportunidad a desempleados que busquen ingresos extras. Para ello, se podrán convertir en 'happy boys' o 'happy girls' y se encargarán del traslado de los paquetes, siempre con un peso inferior a los cinco kilos.
Happy Box, que nació en la incubadora de Promálaga, es el nombre de esta plataforma, cuya presentación ha tenido lugar este viernes en el Pimpi Marinero de Málaga y ha contado con la asistencia del alcalde, Francisco de la Torre.
Precisamente, De la Torre ha querido probar este servicio y ha enviado desde el mismo Pimpi Marinero un sobre a su secretaria, en el Ayuntamiento de Málaga. "Me alegra mucho que esta idea haya tomado cuerpo en una de las incubadoras de Promálaga", ha comentado, haciendo hincapié en que "la capital malagueña quiere ser el imperio de las 'startups', el paraíso de las 'startups'".
Según ha explicado José Ferrer, director general de Solbyte, socio tecnológico de la empresa, "Happy Box es una 'app' móvil mediante la que cualquier persona puede mandar desde unas llaves hasta un paquete de cinco kilos con sólo una foto", .
Así, Ferrer ha apuntado que, "tras insertar el punto de recogida y de envío del paquete, un 'happy boy' o 'happy girl' se encarga de que llegue a su destino en menos de una hora".
Por su parte, el director de Happy Box, Christian Orejuela, ha incidido en la apuesta por la generación de empleo que se hace con esta iniciativa: "queremos dar una oportunidad a quienes buscan ingresos extra o tienen algunas horas libres para trabajar con nosotros".
EXPANSIÓN
El lanzamiento al mercado de esta aplicación se ha iniciado este viernes con la presentación en Málaga. La próxima parada antes de que termine el año será la expansión a siete ciudades más, como Madrid y Barcelona, y en 2016, según Orejuela, "nos lanzaremos al otro lado del charco para llevar tecnología malagueña por todo el mundo".
Además, la compañía ya cuenta con acuerdos comerciales y colaboraciones con empresas como la administración de lotería La Bruja de Oro y El Pimpi.
A una actividad consolidada y de primera necesidad como es el envío de paquetería, Happy Box ha aplicado las nuevas tecnologías para mejorar la gestión del proceso.
En palabras de sus promotores, Christian Orejuela, José Ferrer, Juan Pineda y Jesús Pedrero, a quienes les avala la experiencia como emprendedores con sus respectivos proyectos empresariales, confían en convertirse en "el WhatsApp de la mensajería física".
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