En torno a unos 400 voluntarios han tomado parte este sábado por la mañana en la jornada de anillamiento científico de ejemplares de flamenco rosa ('Phoenicopterus ruber roseus') que cada año promueve la Junta de Andalucía en el Paraje Natural Marismas del Odiel, en la provincia de Huelva.
A través de un comunicado, la Junta ha informado que el grupo, entre el que se encontraba el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, ha marcado así "más de medio millar de pollos de esta especie" en una campaña que ha fijado un nuevo récord que acrecienta la posición de la Reserva de la Biosfera como referente de esta ave en Europa. La colonia se ha elevado en 2015 hasta las 3.500 parejas reproductoras en este espacio protegido, 600 más que las registradas en 2014, cuando la cifra ya duplicaba las contabilizadas un año antes.
"La cita ha vuelto a ser un ejemplo de participación, de compromiso social, de sensibilidad ambiental y de solidaridad, como lo demuestra el amplio elenco de entidades que se han involucrado, una vez más, en una acción en la que confluyen componentes divulgativos y de concienciación con el apartado técnico y científico", ha subrayado Fiscal.
Entre los participantes que han intervenido se encuentran las Redes de Voluntariado de Marismas del Odiel y de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, la Estación Biológica de Doñana, el SEO/Bird Life, y las aulas de la sostenibilidad de las universidades de Huelva y Málaga, además de otros espacios naturales como la Laguna de Fuente de Piedra, en Málaga, o la Cañada de los Pájaros, en Sevilla.
Además, a ello hay que añadir la intervención de Salinas del Odiel y empresas de uso público y turismo activo, la Autoridad Portuaria, la Obra Social de Unicaja, la Diputación Provincial de Huelva --a través del Servicio de Control de Mosquitos-- y ayuntamientos del entorno, como los de Aljaraque, Gibraleón, Huelva y Punta Umbría, así como Ecologistas en Acción o el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
Todo ello junto a la ciudadanía en general, otras asociaciones como la de Alcohólicos Rehabilitados Onubenses y la comunidad educativa, representada por los 331 alumnos de centros de Primaria y Secundaria de toda la provincia que han participado durante el año en el programa de visitas de escolares al Centro de Recuperación de Especies Amenazadas y de Gestión del Medio Marino Andaluz (Crea-Cegma) Marismas del Odiel. De estos últimos, cuatro menores han recibido un diploma y regalos por sus trabajos sobre los valores naturales de la Reserva de la Biosfera.
De este modo, como ha aseverado el titular de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, se ha conseguido llevar a un amplio sector de la sociedad la biodiversidad de un enclave que, "en perfecta armonía con lo urbano y la actividad económica", engloba ecosistemas tan variados como el monte mediterráneo, la salina o las lagunas de agua dulce y se erige, entre otros hitos, en la zona de invernada de la espectacular águila pescadora de mayor relevancia de la Península Ibérica. "Gracias a ello, a ese conocimiento y a ese empeño de todos, Marismas del Odiel no sólo está hoy más a salvo, más protegida, sino que, incluso, atesora una mayor riqueza, aporta más", ha sentenciado.
EL FLAMENCO ROSA
El anillamiento del flamenco rosa, que se enmarca dentro del programa de nidificación de esta especie que arrancaba en 2008 y que, tras siete años de vigencia, ha contabilizado en 2015 el nacimiento de hasta 3.400 pollos en esta Reserva de la Biosfera (en 2014 la cifra fue de 2.600), permite, según Fiscal, "analizar su dispersión por distintos humedales de Andalucía, el Mediterráneo o el norte de África".
En esta línea, el consejero ha subrayado la condición de los espacios naturales de la región como "elementos esenciales" para la vida de estas aves. Los mismos ponen de relieve, según sus palabras, su "funcionamiento en red", en la medida en que "comparten estos hábitats y establecen relaciones complementarias, de tal modo que la conexión es total entre las colonias de Fuente de Piedra, Doñana y Marismas del Odiel".
En el caso del Paraje Natural Marismas del Odiel, a diferencia de otros humedales, la reproducción no depende en tanta medida del régimen pluviométrico gracias a la presencia de las salinas, una circunstancia que, como ha señalado el responsable de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, viene a garantizar la tranquilidad y la abundancia de comida. La base de la alimentación de los flamencos, de hecho, es la artemia, un pequeño crustáceo muy presente en esta Reserva de la Biosfera y causante directo también del color rosado de estas aves.
RESERVA DE LA BIOSFERA
Si en 2014 se conmemoró el 25 aniversario de la Ley 2/1989 con la que el Parlamento Autonómico daba luz verde a la configuración de la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía (Renpa), este año la jornada de anillamiento de flamencos ha ofrecido una dedicatoria especial a la Reserva de la Biosfera.
Un punto en el que no se puede olvidar que se trata de una figura cuyo objetivo es "la conservación y protección de la biodiversidad, pero también el desarrollo económico y humano de estas zonas, la investigación, la educación y el intercambio de información entre los diferentes enclaves que forman la red mundial, con la participación de administraciones y agentes sociales como piedra angular".
En este sentido, Fiscal ha calificado el año 2015 como "un impulso en sí mismo al desarrollo sostenible, económico, social, cultural y ambiental de los municipios del entorno del Paraje Natural Marismas del Odiel gracias a la luz verde a la ampliación de la Reserva de la Biosfera", con un documento que contempla el ensanche de la zona de transición exterior en 46.003 hectáreas que incluyen espacios marinos y núcleos urbanos para abarcar una superficie total de 53.365 hectáreas.
"El acuerdo ya fue trasladado al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para que éste, a su vez, lo elevara a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco)", ha explicado Fiscal.
La ampliación, en el marco de una figura flexible que no conlleva nuevas afecciones ambientales ni socioterritoriales y que es el resultado de un largo proceso de participación para abarcar a las marismas de los ríos Odiel y Piedras en su conjunto, constituye una puerta abierta a "proyectos y programas específicos, a inversiones, a la llegada de fondos europeos y a la integración de los productos y servicios del entorno en la Marca de Reservas de la Biosfera o el Club de Productos Turísticos Reserva de la Biosfera".
Algo a lo que hay que añadir el fortalecimiento del vínculo entre la población y el significado de estas marismas como patrimonio ambiental, lo cual, a juicio del consejero, "ayudará a reorientar las actividades económicas locales, al nacimiento de nuevas iniciativas emprendedoras ligadas a la economía sostenible".