Ha llegado el verano y Andalucía es uno de los principales destinos de sol y playa del mundo y no podemos dejar pasar la ocasión para hacer un recorrido por algunas de las playas más espectaculares, la gran mayoría reconocidas con la Bandera Azul por su calidad, y todas con infraestructuras hoteleras de la más alta calidad para poder disfrutarlas. La diversidad de Andalucía se traslada también a sus costas y, de hecho, nada tienen que ver las playas de Almería con las de Huelva, ni las de la Costa del Sol con la tropical granadina o las de Cádiz. En este reportaje recorremos algunas de las mejores playas, desde la costa almeriense hasta la frontera con Portugal.
Almería podría considerarse como el pequeño paraíso andaluz, especialmente si nos adentramos en el Cabo de Gata, con paisajes que sorprenden, predominando un litoral completamente virgen, bañado por aguas transparentes y salpicados por calas y mares de arena fina.
Entre sus playas destacan las de Monsul, una de las más famosas del Parque Natural por haber aparecido en multitud de películas y anuncios comerciales. Su singularidad está en las formaciones de lava erosionada que la rodean, en la belleza de su arena fina y en su agua cristalina. La de los Genoveses contrasta con la anterior por estar formada por dunas de arena fina y dorada, ubicada en un valle sin apenas construcciones y sin carreteras asfaltadas que conserva la belleza en su estado más puro.
La de los Muertos es una enorme playa totalmente recta de más de un kilómetro de longitud y que tiene el agua más azul y cristalina de la zona, con arenas que se hacen más finas cuanto más nos acercamos a la orilla. De difícil acceso pero de maravilloso baño cuando lo permite el levante, cuando se vuelve tan peligrosa como su nombre indica.
De la virginidad de Almería pasamos a la costa tropical de Granada, cuyo microclima subtropical le confiere a esta zona 320 días de sol al año y una temperatura media de unos 20 grados. Sus playas están dominadas por pequeñas piedras rodadas que dan paso a aguas transparentes. La más conocida es la de la Herradura, lineal y con una orilla perfecta, desde la que poder disfrutar las montañas que se divisan mientras se toma el sol. Otra de las playas a destacar es la de Calahonda, una de esas en las que adentrarse poco y caminar tranquilamente sin que cubra. Es larga, de casi un kilómetro y medio, con una anchura de más de 50 metros, formada por arena gruesa y con aguas normalmente tranquilas.
Las calas malagueñas
Del clima tropical pasamos a la Costa del Sol malagueña, con gran variedad de playas. Entre todas destacan las de Nerja, que comprenden trece kilómetros de litoral y en las que dominan la piedra rodada, las aguas transparentes y barrancos escarpados que protegen rincones para nunca olvidar. Desde la playa de Burriana se pueden ver las montañas y acantilados que rodean Nerja, entre ellos el Balcón de Europa, donde encontrará la de Calahonda. La playa y las calas de Maro, ideal para los amantes del buceo, nos ofrecen una belleza inigualable, calitas que también puede encontrar en el Pino, espacios perdidos para rendirse al relax.
De Málaga saltamos a los kilométricos atardeceres de Cádiz, con orillas de fina arena blanca, aguas turquesa y bellos entornos naturales. Entre sus hermosas playas destacamos la de Bolonia, una de las últimas vírgenes del sur de España, enclavada en un paraje de gran belleza natural y de interés histórico debido a las ruinas romanas de Baelo Claudia.
Hay que disfrutar los dorados atardeceres de las kilométricas playas de Conil, conocidas por la calidad del agua, la arena y por sus servicios. La costa de Conil cuenta con diversos tipos de playas, desde calas íntimas de espectacular belleza, a playas extensas y de gran amplitud con ausencia de construcciones, en la que sentir su estado completamente virgen.
De colores y atardeceres
Y para colores, el turquesa de las limpias aguas de Zahara de los Atunes. Con más de 8 kilómetros de longitud, 100 metros de anchura de dorada y fina arena y 60 metros de flora autóctona protegida por todo el litoral. Es uno de los pocos lugares en los que se funde el verde de la naturaleza con el azul del mar.
Terminamos el recorrido en las arenas doradas de Huelva y su luz. Destacamos las playas vírgenes de Mazagón, junto a Doñana, cinco kilómetros de arena dorada, anchas orillas y todo el relax necesario para descansar en familia o simplemente pasear. Pero, sobre todo, disfrutar de sus atardeceres.
Más virginidad si acaso encontramos en las playas de la Flecha del Rompido, doce kilómetros de arena virgen, rodeadas de senderos entre dunas, donde anidan multitud de especies de aves. Playas de tonalidades suaves, amplias y de atardeceres mágicos que convierten a este lugar un rincón de inigualable belleza.
La última playa que recomendamos es la Punta del Moral. Sobre todo, disfrutar de su extensa arena fina, dorada y blanca, entre los cambios de mareas. A pesar de poseer multitud de hoteles y urbanizaciones, la playa es casi virgen, con un entorno natural espectacular y rodeado de dunas.
Cante, baile y toque a lo largo de todo el verano
La época estival ofrece una oportunidad única para conocer uno de los sellos de identidad más importantes de Andalucía, el flamenco. Y son numerosos los festivales que ofrecen la posibilidad al visitante de conocer el cante, el baile y el toque jondo de nuestra tierra.
La primera cita, que finaliza el 12 de julio, la encontramos en el Festival de la Guitarra de Córdoba, con una amplia programación de más de 20 conciertos y 13 cursos, más una master class y cuatro espacios fijos de desarrollo del evento. Aunque hay espacio para todos los estilos (el jazz o Serrat -11 de julio- o Sting -12 de julio-), se darán cita prestigiosos maestros como Manolo Sanlúcar, José Antonio Rodríguez, Josemi Carmona y Pepe Habichuela, con actuaciones de Niño Josele y Chano Domínguez.
Del 13 al 22 de julio se celebrará en Granada el Festival de las Cuevas del Sacromonte, con las actuaciones destacadas de Alba Heredia, Judith Cabrera, Rubén Campos y Kika Quesada.
En esa semana tendrá también lugar, el 17 y 18 de julio, el Festival de la Luna Flamenca de Guaro, en Málaga, que en su vigésima edición vuelve a llevar el flamenco no sólo al auditorio, sino a todos los rincones de la localidad, con un mar de velas que le dan un especial calor al evento. Mientras que el viernes actúan las jóvenes promesas del flamenco, el sábado actúan en el anfiteatro morisco El Cabrero, Miguel de Tena, Jesús Méndez, Virginia Gámez y Mercedes de Córdoba.
El 25 de julio se celebrará uno de los grandes festivales de flamenco de Andalucía, el del Cante Grande de Casabermeja, que destaca por su estilo tradicional, con mesas en las que se agrupan los espectadores a modo de tablaos flamencos, un evento único declarado como Fiesta de Singularidad Turística Provincial ademas de Interés Turístico Nacional de Andalucía.
En la edición de este año, al cante estarán Herminia Borja, Mari Peña, La Tana, Rancapino Chico, Andrés Lozano, Perico Pañero y José Pañero; al baile, Carmen Ledesma; y al toque, Antonio Moya, Manuel Jero y Rubén Lara.
No podemos dejar pasar en este recorrido flamenco el 56 Festival Internacional de Música y Danza Cuevas de Nerja, que, aunque ya ha comenzado, incluye entre sus espectáculos gratuitos la actuación de uno de los grandes, José Mercé, y sus 40 años de cante, el 23 de julio.
Y continuará el flamenco en agosto, destacando la actuación de Sara Baras en el Starlite Festival, que rendirá homenaje a los maestros el 11 de agosto en Marbella.
Imagen del Cabo de Gata facilitada por: https://www.juanpascual.es
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