El subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, descartó hoy "absolutamente" la posibilidad de liberar el peaje de la AP-7 durante el año y medio en el que se acometerán las obras del túnel para soterrar la A-7 a su paso por San Pedro Alcántara, en el municipio malagueño de Marbella.
Esta posibilidad está "absolutamente descartada", subrayó López Luna, para después aclarar que se adoptarán otras medidas previstas si fuera necesario, pero no la apertura del peaje.
El subdelegado visitó Marbella para explicar el plan de tráfico alternativo ante el inicio de la primera fase de construcción del túnel la próxima semana.
Por este motivo, se cortará el tráfico rodado en sentido Málaga-Algeciras a partir del martes y los cerca de 65.000 vehículos que circulan cada día por esta carretera serán desviados por la variante sur de San Pedro Alcántara.
En dos meses, se completará esta primera fase y los trabajos continuarán en toda la vía, por lo que se cerrará en su totalidad durante un año y medio.
Las obras de acondicionamiento de la autovía del Mediterráneo, A-7, en el tramo de la travesía de San Pedro Alcántara, cuentan con un presupuesto del Ministerio de Fomento que supera los 60 millones de euros.
Se actúa sobre los seis kilómetros existentes entre el río Guadalmina y Puerto Banús con la construcción de un túnel de aproximadamente un kilómetro para soterrar la vía y eliminar las rotondas y semáforos, así como facilitar la permeabilidad norte-sur del núcleo poblacional.
Sobre la posibilidad de liberar el peaje durante el año y medio en el que la A-7 permanecerá cortada al tráfico, tal y como solicita el Ayuntamiento de Marbella, López Luna aseguró que "nadie, en su sano juicio", puede pedir que se incremente un presupuesto de 70 millones de euros. "Ya se dobló el inicial de 30 millones de euros, y en los momentos de crisis nadie puede pedir eso cuando existen alternativas", declaró.
En este sentido, el jefe de la Demarcación de Carreteras del Estado en Andalucía Oriental, Salvador Fernández Quesada, explicó que la gratuidad del peaje supondría un coste estimado de 45 millones de euros --20 millones que dejarían de ingresarse en la recaudación anual del peaje, a lo que se sumaría el sobrecoste de explotación que conllevaría el paso de unos 40.000 vehículos adicionales por la autopista--. "Un gasto excesivo, ya que el desvío alternativo es suficiente", añadió.
Por tanto, los vehículos que circulen a partir del martes en dirección Málaga-Algeciras serán desviados por la variante sur, un vial alternativo "con similares características" a la A-7, con cuatro carriles de circulación y conexiones con el viario urbano en glorietas con semáforos.
López Luna apuntó que el desvío que se propone es el "adecuado", será "prácticamente igual" que si se circulara por la A-7 y se comprometió "públicamente" a realizar un seguimiento "constante" por si surgieran más problemas de los previstos, con el propósito de "adoptar en su caso las medidas necesarias para evitar el mayor número de dificultades a los usuarios", aunque nunca se pasaría por la liberalización del peaje.
Advirtió de que existen "cuestiones colaterales", como la apertura del peaje, impulsadas por el Ayuntamiento, que fue invitado a esta presentación y no acudió, según precisó, que pueden desviar la atención de las obras. "No sé si habrá intención política o no, pero sólo se habla del peaje y no del proyecto, de esta gran inversión del Gobierno central", aseveró.
Fernández Quesada vinculó los retrasos acumulados desde el pasado 23 de abril en el inicio de la primera fase de construcción al Ayuntamiento de Marbella. "Las obras se están coordinando con el Ayuntamiento; finalmente, no comenzaron hoy porque este fin de semana se celebra una prueba deportiva en la variante sur organizada por el Consistorio", concluyó.
Ayuntamiento de Marbella
Por su parte, el portavoz del equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Marbella, Félix Romero, criticó hoy que el Gobierno central no acceda a la petición del Ayuntamiento de liberar el peaje de la autopista mientras duren las obras.
Romero indicó que "ningún informe que pueda realizar el Ministerio de Fomento puede suplir la realidad de una zona que siempre ha sufrido atascos tremendos y que se verán ampliamente agravados durante el desarrollo de las obras".
"El interés en este momento del Ayuntamiento es el de evitar en la medida de lo posible los problemas antes de que se produzcan", manifestó el concejal del PP, quien añadió que ésta es "la única solución al grave problema circulatorio que se producirá cuando tenga lugar el corte total de la A-7", por lo que "lo seguiremos reclamando".
Por último, calificó de "cortina de humo" las declaraciones que apuntan a que el Ayuntamiento ha solicitado el retraso de los cortes que se han producido en las últimas semanas. "No existe ninguna petición por parte del Gobierno local en este sentido y la situación en la que los cortes no se terminan de producir responde más a la falta de planificación que a otra cosa", afirmó.