Así recoge la pancarta que cada primer jueves de mes acoge en Pinillo Chico. Dignidad. En una de las acepciones de su significado, anuncia “cualidad de digno, que se comporta con decoro y se hace respetar”. Respeto.
El que ha venido reclamando El Puerto en las demandas que se ha ido acumulado a lo largo de las últimas décadas. Sí, 30 años se ha tardado en conseguir unos terrenos (desde 1997), ante la pasividad de las administraciones. Segunda acepción. “Seriedad de las personas en la manera de comportarse”. Sensato.
La unión de que todas las formaciones políticas hayan acercado la estación de autobuses y ésta sea una realidad en breve. Más allá de la foto estéril y corporativa, la dualidad municipal y la Estatal empieza a dar sus frutos. No se puede decir lo mismo del efímero amor-odio del pacto andaluz. Tercera acepción. “Cargo honorífico y de autoridad”. Atribución.
Cuarta acepción. “Persona que tiene este cargo”. La noticia positiva de un nuevo equipamiento, recuerda, las reivindicaciones pendientes como el Centro de Salud de la Zona Norte con unas elecciones andaluzas en un horizonte cuanto menos impredecible. O la Ciudad de la Justicia, sin presupuesto del Gobierno de la nación, y la Comisaría de Policía Nacional con otras elecciones en noviembre. Respeto.
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