El Consejo de Gobierno andaluz ha dado hoy luz verde al Plan de Calidad Turística 2014-2020, que con un presupuesto de 20 millones de euros pretende impulsar un nuevo modelo de desarrollo turístico basado en la calidad, la accesibilidad y la sostenibilidad.
El consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, ha informado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que el objetivo de este plan es que el turista encuentre en Andalucía "un destino excelente en la prestación de servicios, la calidad de los productos, la atención y el trato".
El Consejo de Gobierno ha aprobado también el Plan Director de Ferias y Congresos 2014-2016, a iniciativa del sector, con el fin de darle "mayor rentabilidad" a las 570 instalaciones receptoras de reuniones existentes en Andalucía, mediante la creación de la marca "Andalucía Congresos".
El III Plan de Calidad Turística de Andalucía 2014-2020, que tiene como fin reforzar la competitividad de la comunidad como "destino líder", incluye medidas para la implantación de buenas prácticas en la gestión de los servicios y de nuevas tecnologías en la gestión empresarial; la protección del viajero; la mejora del empleo en el sector y el impulso de modalidades de turismo desestacionalizadas y respetuosas con el medio ambiente.
El documento consta de tres líneas estratégicas (excelencia, innovación y formación, y coordinación y diálogo) y nueve programas específicos.
El consejero, que ha recalcado que no es un plan "fruto de laboratorio, sino de horas de reuniones con el sector", ha incidido en la puesta en marcha de un "sistema protector" para el turista basado en un proceso de arbitraje y mediación "ágil" que resuelva en un "plazo corto" las quejas de los visitantes.
Sobre la mejora el empleo en el sector, Rodríguez ha reiterado hoy que los puestos de trabajo que se están creando no son "de la calidad, la formación y estabilidad que el sector necesita".
"Para una persona de Izquierda Unida (IU) como yo, el trabajo estable y de calidad es una cuestión de justicia social, pero en este sector, además, es imprescindible para que un negocio turístico sea rentable y competitivo a medio y largo plazo", ha remachado.
A su juicio, la reforma laboral "impuesta" por el PP "incita a la precariedad, la baja formación y la inestabilidad", por lo que ha pedido a los empresarios que "no caigan en la trampa del PP, en la trampa de la reforma laboral", ya que "beneficios contables a corto plazo suponen perjuicios seguros a medio y largo plazo", ha dicho.
Una de las prioridades de la nueva estrategia turística es el impulso a las certificaciones de calidad del sector, que acumula un total de 1.894, entre ellas la marca "Q" de Calidad Turística, las Banderas Azules, la Carta Europea del Turismo Sostenible y la Marca Parque Natural de Andalucía.
Por provincias, Málaga es la que concentra el mayor número de certificaciones, con 685 (el 36,1% del total), seguida de Sevilla, con 310 (15,4%), y Cádiz, con 274 (14,4%).
Durante el pasado año, Andalucía recibió 21,6 millones de turistas, que generaron 41,2 millones de pernoctaciones hoteleras.
Por su parte, el Plan Director de Ferias, Congresos y Reuniones se propone situar a la comunidad como líder en este segmento "clave" por su efecto desestacionalizador y su capacidad de generar empleo.
El plan incorpora un diagnóstico de las debilidades y fortalezas de la región en este ámbito, destacando entre las primeras la excesiva competencia entre destinos, las actuaciones independientes de los agentes del sector, la falta de aprovechamiento de las nuevas tecnologías y de un sistema unificado de recogida de datos.
Como fortalezas, el plan subraya la variedad de la oferta, la profesionalización, el clima, las infraestructuras de transporte y el posicionamiento de la marca turística Andalucía.
A partir de este análisis, se establecen nueve programas y 29 medidas en torno a tres áreas para aumentar la competitividad del sector: calidad e innovación; desarrollo socioeconómico, y promoción y comercialización.
El turismo de congresos se considera estratégico por su capacidad para luchar contra la estacionalidad; su contribución a la diversificación de la oferta; su efecto dinamizador y multiplicador de visitantes, y sus posibilidades de generar sinergias con el comercio y con otras actividades.
Esta tipología turística atrae a la comunidad a más de 600.000 visitantes cada año y aporta unos ingresos de 282 millones de euros.
Se trata de viajeros con un mayor nivel de gasto medio diario en relación con el resto (más de 173 euros) y que presentan una estancia media de 2,7 días, también superior al resto de turistas.
Andalucía dispone de 344.000 plazas en 569 establecimientos con instalaciones destinadas a ferias, congresos y reuniones (443 salas en hoteles, 17 palacios de congresos y 109 espacios singulares).
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
