El vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, ha asegurado este martes que espera y desea que los expresidentes del Gobierno andaluz Manuel Chaves y José Antonio Griñán dimitan "sin que nadie les tenga que empujar" en el caso de que sean imputados en el caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares por el Tribunal Supremo, al que le ha exigido "rapidez en el esclarecimiento del alcance de las responsabilidades administrativas o políticas" que se hayan podido dar.
Así lo ha dicho en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, en la que también ha querido dejar claro que, pese a la presencia de IULV-CA en el Ejecutivo autonómico, su federación es "implacable" en la lucha contra la corrupción y "no se va a casar con nadie alcance a quien alcance". De hecho, ha afirmado que si en algún momento "ese alcance imposibilita" la presencia de IULV-CA en el Gobierno andaluz, "pues no estaríamos en el gobierno".
Es por esta razón por la que Valderas ha insistido en que el de los ERE es "un asunto que no se puede eternizar en el Supremo" y, tras reclamar al Alto Tribunal una "respuesta rápida" sobre los diputados del Congreso aforados, ha subrayado que si finalmente hay "imputación" de Chaves y Griñán, "sólo hay un camino, que es el de la dimisión".
"Por eso las cuestiones deben de quedar claras y ser rápidas porque cuando se trata de cosas tan escandalosas como los ERE o de otros casos de corrupción, pues no queda otro camino que el de la dimisión. Pero vamos a esperar y desear que el Supremo actúe con rapidez, que es lo que quiere la ciudadanía con un tema que lleva ya demasiado tiempo", ha esgrimido al respecto.
Cuestionado sobre si la postura de IULV-CA ha generado controversias con su socio de gobierno, el PSOE-A, el vicepresidente ha recordado que en materia de corrupción "no había ningún tipo de acuerdo" entre ambas formaciones porque la suya lo que pedía era "ir al fondo, alcance a quien alcance y, sobre todo, renovar y prestigiar las instituciones".
UN NUEVO TIEMPO POLÍTICO
De ahí, según ha enfatizado, que desde que ha llegado de IULV-CA se haya abierto "una nueva etapa en la lucha frontal contra la corrupción", con más de 20 medidas en esa materia y con las que aún "se tienen que adoptar" como la Ley del Alto Cargo, con "nuevos compromisos éticos", la reforma de la Ley de la Cámara de Cuentas o la nueva Ley del Defensor del Pueblo.
"Hay que seguir avanzando para imposibilitar cualquier elemento que pueda suponer delinquir", ha sentenciado Valderas, quien ha defendido que el actual Gobierno andaluz está actuando de forma "implacable" contra la corrupción y que "por eso lo primero que hubo fue una comisión de investigación" sobre los ERE, según ha recordado.
A su juicio, esta comisión en la que "tuvieron que comparecer tanto el señor Chaves como el señor Griñán y el señor Zarrías entre otros muchos responsables políticos", puso "incluso un alcance de responsabilidad en las personas de los consejeros Viera y Fernández" aunque al final "aquello derivó en que no fue aprobada ni por PP-A ni por PSOE-A".
"Creo, además, que como consecuencia de esta comisión de investigación, hubo una modificación profunda en el Gobierno: Griñán dejó de ser presidente y ningún consejero que hubiera podido estar cerca se quedó", ha resumido Valderas para ensalzar "los cambios" sufridos en el Ejecutivo autonómico con la llegada de IULV-CA, que ha traído "un nuevo tiempo político" en el que "ha nadie le ha temblado el pulso ni le va a temblar" en la lucha contra la corrupción.
A la pregunta de por qué IULV-CA ha rechazado poner en marcha nuevas comisiones de investigación en el Parlamento andaluz tal y como han pedido los 'populares', ha advertido de que su federación "tiene muy claro su nivel de coherencia y honestidad" y que será ella y no el PP-A quien "marque nuestro ritmo".
Sobre todo, según ha apostillado, porque una comisión de estas características es "un elemento muy serio" e IULV-CA no está dispuesta a que sea "bastardeada" como pasó con la de los ERE, cuando sintió "mucho y mal como (Juan Ignacio) Zoido", el entonces presidente del PP-A, "se abrazaba al PSOE-A en lugar de apoyar las conclusiones de IU, que iban más allá".