La consejera de Justicia y Administración Pública en funciones, Evangelina Naranjo, criticó ayer la "grave irresponsabilidad" del PP por intentar "sacar pecho" en el caso de Marta del Castillo.
Naranjo hizo esta crítica tras ser preguntada por los periodistas por las afirmaciones realizadas por el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, quien el martes dijo que llegará el momento de exigir algunas "responsabilidades" al Gobierno por este caso. Arenas señaló que en este asunto ha habido cosas que se han hecho bien, otras no tan bien pese a la "buena intención", pero otras "nada bien" y que merecen "cuanto menos" explicaciones por parte del Gobierno.
La consejera señaló que "cuando termine la investigación, hablaremos". "Creo que es una irresponsabilidad muy grande la que se está haciendo en el caso de Marta por parte de algunos dirigentes políticos", ha subrayado Naranjo antes de pedir que se deje "actuar a los cuerpos y fuerzas de seguridad, al ministerio público y al juez en un caso como éste", porque "después se verá lo que se tenga que ver".
El fiscal superior de Andalucía, Jesús Calderón, por su parte, aseguró que la Fiscalía "mantiene una posición discreta sobre la investigación", que es "la adecuada" y la "correcta". "Lo que hay que hacer - apuntó el fiscal superior- es esperar a que el curso de la investigación nos permita afrontar nuestras obligaciones procesales con garantías en el futuro, porque el proceso no ha hecho más que empezar", según dijo.
Sin embargo, los populares incidieron ayer en sus críticas. Así, la portavoz parlamentaria del PP, Esperanza Oña, anunció ayer que van a exigir responsabilidades políticas al Gobierno andaluz en el Parlamento autonómico por los "fallos garrafales" que se han producido en el caso del asesinato de la joven sevillana Marta del Castillo.
En rueda de prensa, Oña señaló que en el caso de la joven Marta del Castillo, al igual que ocurrió con el asesinato de la niña Mari Luz de Huelva, han ocurrido "fallos garrafales" del sistema que, en el primero de los casos, afectaron a la Justicia y en el segundo al "esclarecimiento" de los hechos.
Oña, que subrayó su respeto por la policía y los jueces, y al contrario que al Gobierno central y al andaluz, informó de que su grupo va a pedir en la Cámara autonómica responsabilidades políticas al Gobierno sobre la falta de medidas y su "complacencia perpetua y su silencio culpable continuo" ante los "fallos garrafales" ocurridos en ambos casos y sobre los que "en ningún caso puede defenderse".
"La falta de crítica del Gobierno andaluz ante estos fallos ya son bastante elocuente y le inculpa claramente en cuanto a las responsabilidades políticas por el silencio", añadió Oña.
El padre no cree que su hija esté en el vertedero
Mientras, Antonio del Castillo, padre de la joven desaparecida hace casi tres meses, manifestó ayer tras más de tres semanas de búsqueda del cuerpo de su hija en el vertedero de Alcalá de Guadaíra que "con el tiempo que llevan buscando" el cadáver de la menor "puede ser que no esté allí".
El padre de la joven dijo que en su opinión la Policía "ya ha llegado seguro" a la zona "estimada" del centro de tratamiento de residuos de la Mancomunidad de Los Alcores en la que supuestamente debería estar el cuerpo de Marta, por lo que, a su juicio, "se están dando cuente de que no está allí".
"No sé que pensar porque allí hay basura para dar y regalar", prosiguió Antonio del Castillo, quien no obstante indicó que "en tres días llegaron a la zona sensible y con la zona sensible llevamos ya más de 20 días".
Sobre la imputación de la novia del hermano del principal imputado por la desaparición y muerte de su hija, el padre de Marta señaló que era "obvia", pues "hay testigos que apuntaban que esa chica no estaba en la casa" de León XIII la noche del crimen. "Si ella declara que estaba allí es porque miente", concluyó Del Castillo sobre la versión de María García, actual pareja de Francisco Javier D. M. e imputada en el día de ayer por su presunta relación con el caso.
Finalmente, Antonio del Castillo reconoció que la Policía le dijo hace algún tiempo que "el aparato de ADN había estado roto y había sido arreglado". "No sé lo que tardan las pruebas de ADN", aseveró el padre de Marta, antes de apuntar que a él personalmente le dijeron "que había habido un problema" con la citada máquina.
