El vicepresidente y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales de la Junta de Andalucía, Diego Valderas, ha destacado este sábado que la futura Ley de Memoria Democrática de Andalucía, que espera ver aprobada por la Cámara autonómica antes de junio de 2015, servirá para "saldar viejas deudas, cerrar heridas, para que no se abran más, y permitir verdades nuevas, porque tiene que conocerse la verdad".
Esa nueva norma, según ha subrayado, "será la más avanzada de todas la normas existentes" en su género y con ella "reconstruir el retrato riguroso de nuestra historia reciente y rescatar la voz de quienes fueron llevados al sufrimiento", con el objetivo, también, de "abrir camino a la nulidad de las sentencias injustas", que se impusieron por el franquismo contra quienes lucharon "por la libertad, la democracia y la República".
Valderas, acompañado del director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Luis Naranjo, se ha expresado así durante su intervención en el acto de señalización como Lugar de Memoria Histórica de Andalucía de la llamada Ruta Guerrillera de 'Los Juiles', en el Cortijo Mojapiés, en plena Sierra Morena, entre un mar de olivos, en el término municipal de Montoro (Córdoba).
Allí se ha reconocido a la lucha guerrillera contra el franquismo recorriendo los parajes en los que transcurrió una parte de la vida de Sebastián, Francisco y Juan Rodríguez Muñoz, conocidos como los hermanos 'Juiles', vecinos de Bujalance (Córdoba), "maquis de Sierra Morena, que aguantaron y lucharon contra los golpistas fascistas" desde el comienzo de la Guerra Civil hasta 1944, según ha relatado Luis Naranjo.
A este respecto y durante su intervención, tras la de Naranjo, el vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, ha afirmado "que no es posible entender los hechos del pasado sin la consideración del territorio en donde acaecieron, ni tampoco entender las particularidades del espacio en el presente, sin reparar en los actos de aquellos que nos precedieron".
"PLÉYADE DE HÉROES"
Asimismo, ha indicado que con este tipo de actos, de los que ya se han llevado a cabo "más de 100 en toda Andalucía", se reconoce el espacio en la Historia y en la memoria colectiva a "una pléyade de héroes anónimos, los últimos soldados de la República, pues como tal deben ser considerados, ya que defendieron un régimen legítimo y democrático ante el golpe militar fascista que condenó a España a 40 años de oscuridad".
Para el Gobierno andaluz, según ha señalado Valderas, el discurso democrático "necesita conocer la verdad de lo ocurrido en esta etapa funesta de la historia" de España, "en la misma medida que lo han hecho países europeos de nuestro entorno, que sufrieron regímenes dictatoriales y que han sabido afrontar lo ocurrido condenando la barbarie", ya que han incorporando al discurso de Estado los planteamientos democráticos en la línea de lo expresado por las organizaciones internacionales y el propio Derecho Internacional.
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