Comenzó el Jaén Paraíso Interior FS una nueva temporada en la Primera División del fútbol sala nacional, para muchos ‘La mejor liga del mundo’. Y lo hizo con un rotundo triunfo en Zaragoza(1-5), ante un rival con el que luchará ‘por la permanencia’, primer objetivo que se marca la entidad que preside Germán Aguayo, que cuenta con un ramillete excepcionales de colaboradores para sacar adelante ‘la nave amarilla’, sin olvidar que en ‘la trastienda’, está Nicolás Sabarigo, cuya presencia se nota, aunque aparezca poco.
Me congratulo una vez más que el club siga apostando por un técnico de la casa. Cuestionado, quizás, al principio, por aquello de que ‘nadie es profeta en su tierra’, Dani Rodriguez está dejando constancia de que es un entrenador muy válido para este equipo, en el que se inició y se retiró como jugador, y ahora crece como entrenador, motivo que para él es un privilegio.
Conozco a Dani desde que era un niño y mostraba una mirada penetrante y profunda hacia Adolfo Boni, su entrenador en el inolvidable Distrito 2, en el que estaban Paco Ortega, Paco Gómez y Willy, entre otros, grandes jugadores de la cantera amarilla, a los que Ángel Aguilera hizo debutar, posteriormente, en el primer equipo y participar en aquella inolvidable División de Honor.
Dani aportaba técnica, entrega y competitividad en su juego, y eso es lo que ahora intenta imponer en el equipo. La competitividad la lleva dentro de sí y la expone en todo momento cuando es entrevistado. “Mis jugadores están preparados para ser competitivos”, “Tenemos que ser competitivos para superar al rival”, “Fuimos capaces de competir ante un equipo…”, son frases que dejan constancia de sus pretensiones, ya que sabe que sin trabajo y lucha en la cancha, nada se consigue, por lo que obliga a sus jugadores a disponer no sólo de condiciones técnicas, sino físicas. Es un técnico que nada deja a la improvisación, carismático, meticuloso, trabajador, estratega y conciso en todas sus acciones. Tiene fe en sus posibilidades y quiere llegar lejos como técnico, aplicando todo lo que aprendió de entrenadores como Boni, para actuar con la Base y de Bruno García, con el que coincidió en el O’Parrulo. En el Jaén Paraíso Interior FS su labor empieza a ser reconocida, y no debe cuestionarse, aunque ese es el destino del entrenador, si a la pelota le da por no entrar en las redes contrarias. Con los conocimientos adquiridos de grandes jugadores como Javi Polo, Paco Tello, Sidney, Quique, Garrido, Catena, Edu, Boni… y de los entrenadores que lo dirigieron, como Aguilera o Bruno García, entre otros, hacen que sus equipos, además de competitividad, aporten, aunque los tiempos han cambiado, aquel alto nivel del exquisito futbol ‘salonista’ que tantas emociones levantaba. Una temporada más, el espectáculo está servido en ‘La Salobreja’. ¡No faltéis!