Presentadas en Diputación las Fiestas y Luchas de Moros y Cristianos en Benamahoma

Una tradición que comenzó en el siglo XV revivirá el próximo fin de semana en Benamahoma, junto al Parque Natural de Grazalema, las batallas cuerpo a cuerpo entre los bandos Moro y Cristiano, para rescatar la imagen de San Antonio de Padua que anualmente tienen lugar en el ecuador del verano, la Fiestas y Luchas de Moros y Cristianos recordarán la historia en un paisaje natural incomparable, como el de La Sierra de Cádiz. Hoy se han presentado en el Palacio Provincial como invitación formal al disfrute de las fiestas que celebran del 1 al 4 de agosto próximo.

Inmaculada Olivero, diputada de Turismo, ha destacado que “la fiesta de Moros y Cristianos es una oferta de ocio alternativo al turismo de sol y playa, un recurso importante para toda la provincia”.

Olivero, que ha destacado la participación de todos los vecinos de Benamahoma en su fiesta más importante, ha adelantado también que el Patronato Provincial de Turismo está trabajando en la edición de una Guía de Recreaciones Históricas en la que se incluirán esta singulares Fiestas y Luchas de Moros y Cristianos.

El historiador Joaquín Ramón Gómez, miembro de la Asociación Cultural de Moros y Cristianos de Benamahoma, ha explicado que la de Benamahoma es la única fiesta de Moros y Cristianos en Andalucía, “y también diferente de las que se celebran en otros lugares de España. En Benamahoma se lucha cuerpo a cuerpo por las calles, sin la espectacularidad de los grandes desfiles, pero con el arraigo de una tradición que comenzó en el siglo XV cuando los caballeros castellanos y los musulmanes de Al Andalus realizaban unos juegos o torneos en esta población de origen árabe”.

José Antonio Calvillo Ramírez, concejal delegado en Benamahoma del Ayuntamiento de Grazalema, al invitar a disfrutar de estas fiestas, ha recordado las excelencias de la población “un lugar acogedor donde se recibe a los visitantes con los brazos abiertos”, y ha recordado que continúan las gestiones para conseguir la declaración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO para su fiesta más antigua y singular.