Dos de los liquidadores de Chernóbil, Andrii Mizko y Alexei Nesterenkoy, visitaron Estepa hace unos días con el objetivo de evitar que caiga en el olvido la catástrofe nuclear acontecida en la central ucraniana en abril de 1986. Los dos liquidadores visitaron el ayuntamiento de la localidad acompañados por Anastasio León Rodas, presidente de la Federación Regional Andalucía Solidaria y el responsable de Estepa Acoge, una de las asociaciones que organiza las acogidas de niños bielorrusos y ucranianos en Andalucía.
Fueron muchas las personas que trabajaron por paliar los efectos del accidente nuclear de Chernóbil, considerado como uno de los más graves de la historia junto al de Fukushima en 2011. Entre estas personas, destaca la labor de los casi 800.000 liquidadores que intervinieron para evitar una nueva explosión y que la catástrofe fuera a más.
Estos hombres, militares en muchos casos, arriesgaron su propia vida intentando apagar el incendio que ocasionó la explosión del reactor número 4 de la central nuclear. Su trabajo evitó también que la explosión afectara a todo el territorio europeo, que podría haberse convertido en una región inhabitable.
Andrii Mizko y Alexei Nesterenkoy, actual presidente de uno de los centros de investigación radiológica más importantes del mundo, participaron de forma activa en la extinción del incendio y el sellado del reactor.
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