El portavoz socialista en el Parlamento andaluz, Manuel Gracia, aseguró ayer que parece como si al PP y a IU "les hubiese sentado mal" el acuerdo sobre la deuda histórica alcanzado la pasada semana entre la Junta y el Gobierno, y que deseaban que esta figura continuara sin resolverse para seguir teniendo elementos de crítica y de oposición al Ejecutivo regional. 


En rueda de prensa, Gracia señaló que tiene la impresión de que a los partidos de la oposición parlamentaria les ha "molestado" el acuerdo como lo prueba que haya sido el propio grupo socialista y el Gobierno los que soliciten informar en el pleno del Parlamento. 


Recordó que el Parlamento acogerá hoy la comparecencia del vicepresidente segundo de la Junta, José Antonio Griñán, a petición propia y del PSOE, para informar del acuerdo alcanzado con el Ejecutivo central sobre la cuantificación de la deuda, mientras que ni PP ni IU han planteado ninguna iniciativa al respecto. 


El portavoz socialista considera "llamativo" que tanto PP como IU "más allá de los gritos, golpes de pecho y declaraciones solemnes" no hayan planteado ninguna propuesta de debate sobre este asunto, y pidió al PP que diga en el resto de España "lo mismo" que está diciendo en Andalucía sobre la cifra cuantificada. 


"Que venga el señor (Mariano) Rajoy y diga que es una cifra insuficiente", planteó el portavoz parlamentario del PSOE. 


Gracia alabó el acuerdo alcanzado el pasado 16 de marzo por el que se cifró la Disposición Adicional Segunda del Estatuto (deuda histórica) en 1.204,41 millones, un logro que calificó como "extraordinario" que por sí solo justifica la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía. 


Según el portavoz parlamentario socialista, el acuerdo sobre la cuantificación de la deuda histórica supone "el triunfo del derecho, de la razón de Andalucía y del Estatuto". 


Respecto a la financiación autonómica, el portavoz socialista señaló que su partido defenderá "hasta el final" los principios y criterios recogidos en el Estatuto que, en su opinión, son válidos para todas las comunidades autónomas, e incluso en las resoluciones aprobadas en el propio Parlamento de Andalucía. 


Gracia, que indicó que su partido no va a aceptar más presión que la del principio de igualdad de todos los españoles al margen del lugar en el que residan, señaló que quienes quieren "mezclar" la deuda histórica con la financiación autonómica solo pretenden "debilitar la posición andaluza" en la negociación. 


"Ha habido acuerdo sobre la deuda histórica pero el acuerdo sobre financiación autonómica no va a depender nada sobre la deuda histórica", advirtió Gracia, quien añadió que en materia de financiación la Junta defenderá el peso poblacional real y efectivo, la igualdad en servicios básicos para toda España y el principio de cohesión y de solidaridad. 


Un "apaño político" según Cristóbal Montoro


Por su parte, el portavoz de Economía del PP y ex ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se mostró ayer convencido de que el acuerdo que el Gobierno central y la Junta de Andalucía han alcanzado en relación con el pago de la deuda histórica, que calificó de un "apaño político", supondrá que la comunidad andaluza reciba por la nueva financiación autonómica "menos de lo que merece". 


Montoro, que apuntó que la deuda histórica es el reconocimiento que se recoge en la Disposición Adicional Segunda del Estatuto de Autonomía andaluz en relación con la "responsabilidad que tiene el Estado de impulsar el desarrollo económico" de Andalucía, "demasiado retrasado" en relación con la media nacional, consideró que este asunto "no puede ser despachado con un acuerdo que representa una cuantía simbólica, que además, en modo alguno, puede desligarse del tema de la financiación autonómica". 


"Con el acuerdo de la deuda histórica, el Gobierno parece dar un pretexto a la Junta para que acepte la nueva financiación autonómica aunque suponga un relegamiento de Andalucía en el conjunto del sistema", apuntó Cristóbal Montoro, quien criticó además que el Ejecutivo nacional "vaya por la vida repartiendo deuda pública porque no tiene ingresos", de manera que se compromete "a más gastos financiados con deuda pública", como será del pago de la deuda histórica con Andalucía. 


Esta situación, a su entender, lo único que provoca es que la crisis sea "más profunda" y se impida dar créditos a familias, pymes y autónomos, al tiempo que también trae como consecuencia el aumento del paro. 


Montoro insistió en que una cosa es el concepto de deuda histórica y otra la cuantía que se ha cerrado, que es un "auténtico apaño político" que no va a contribuir a "resolver nada" en Andalucía. Recalcó que es "intolerable" que se haya "mezclado" la deuda histórica con la financiación autonómica, lo que pone de manifiesto que el Gobierno ha dicho a la Junta que "con esto os conformáis porque vais a recibir menos de lo que os merecéis" por el nuevo sistema, según dijo.


Arenas pide que Andalucía sea la que más fondos reciba


En el mismo sentido se expresaba el presidente del PP-A, Javier Arenas, quien exigió ayer al presidente de la Junta, Manuel Chaves, que rechace "cualquier acuerdo" sobre financiación autonómica en el que Andalucía "no sea la primera en recibir más fondos". 


Arenas, que presidió ayer en Córdoba una reunión del comité regional de su formación, recordó que si el modelo de financiación autonómica plantea un reparto de los fondos en función de la población, la comunidad andaluza "cuenta con ocho millones de personas y, por tanto, debe ser la que más reciba". 


En este sentido, criticó que el consejero de Economía, José Antonio Griñán, afirme que "no recibiremos menos de mil millones, que es lo mismo que pedir limosnas en lugar de justicia". 


Por otro lado, Arenas hizo un llamamiento a los cordobeses para que el próximo domingo acudan a la manifestación que han convocado los populares en la capital para exigir "medidas estructurales" que eviten el aumento del paro. 


El presidente popular afirmó que en la provincia cordobesa existen "mas de 70.000 motivos para acudir a la manifestación, tantos como parados" y anunció que se trata de la primera de las ocho convocatorias similares que se llevarán a cabo en Andalucía. 


Además, concretó que no se trata de una manifestación "contra nadie", sino para "defender el empleo", por lo que espera que acudan a la manifestación "todas las personas sea cual sea su sensibilidad política". 


En este sentido, el PP espera que la concentración contra el desempleo suponga un "motivo de esperanza para mejorar en el futuro" y subrayó que hasta Andalucía "llegan los vientos de cambio que ya se han dado en Galicia o el País Vasco". 


Asimismo, auguró un "éxito espectacular" para su partido en las próximas elecciones europeas que supondrán el "inicio del cambio que se dará en la municipales y posteriormente en las generales y autonómicas". 


Por otra parte, Arenas lamentó el sistema de contratación pública de la Junta de Andalucía que supone un "mal ejemplo" ante los casos de corrupción urbanística en la región. 


De esta manera, criticó que la mitad de los concesiones públicas de la administración autonómica "no salen a concurso, a pesar de tener que contar con publicidad y concurrencia", lo que, a su juicio, provoca "despilfarro y arbitrariedad" en la contratación. 


Un "mal ejemplo", según Arenas, quien anunció que su partido pondrán en manos de los jueces "toda la documentación de la que disponemos y que demuestra que el PSOE sabía lo que estaba ocurriendo en Alcaucín (Málaga)", donde se investiga una presunta trama de corrupción urbanística en el Ayuntamiento de dicha localidad. 


En este sentido, Arenas consideró que la Junta de Andalucía "sabía lo que estaba pasando y no actuó", lo que supone una "gran irresponsabilidad" y una presunta negligencia.