Tras la tormenta siempre llega la calma. Hablamos de la situación que estaban padeciendo los taxistas gaditanos cada vez que tenían que ir al aeropuerto de Jerez para llevar o recoger un cliente, como les permite hacer la Ley 11/1985, normativa que permite que taxistas de otras localidades puedan recoger o llevar clientes a los aeropuertos y puertos. “Ahora mismo, no hay problemas, la tensión se ha rebajado”, indica a este medio el presidente de la Asociación Gaditana de Radio Taxi, Manuel Orihuela.
Orihuela señala que “oficialmente no sé si ha cambiado o no la directiva de la asociación de taxistas jerezanos”, aunque sí es cierto que “desde la Delegación Territorial responsable del área de Transporte se está llevando a cabo una encuesta para saber el número de vehículos que acuden al aeropuerto para recoger clientes”, una encuesta que pretende dilucidar el volumen de este tipo de actividad para que sirva como herramienta a la hora de escuchar las demandas del sector del taxi en Jerez. Eso sí, la postura de la Junta de Andalucía “es la misma que en Málaga”, es decir, reitera que el decreto ley 11/1985 sigue vigente y cualquier modificación del mismo debe llevarse a cabo por consenso y con un acuerdo común en el que participe todo el sector del taxi.
Sobre la petición del colectivo jerezano de solicitar la reciprocidad modulada, para los gaditanos “no tiene sentido, diremos que no porque es un servicio que perderemos nosotros”, y encima sería a cambio de ir al aeropuerto, “es decir, a un sitio que no tiene apenas servicios, son apenas cinco vuelos al día y la mayoría de esos viajeros llegan de la mano de un operador turístico que les espera con un autobús a las puertas del aeródromo de Jerez”. Es decir, las cuentan no salen.
“Ahora mismo no hay problemas, está más tranquilo, no necesitamos escolta y no hay policías en la zona”, señala Orihuela, quien recuerda que “nosotros (la asociación gaditana de radio taxi) interpusimos una denuncia contra la asociación de teletaxi de Jerez y contra Aena, la cual fue admita a trámite por el juzgado de guardia”, pero fue “una medida preventiva para que se intensificara la vigilancia policial en el aeropuerto”, por eso está convencido de que quizás esa denuncia “se quede en nada, pero la intención era prevenir ante el aumento de la tensión y por las amenazas recibidas por los compañeros”.
Un taxista gaditano que acude al aeropuerto confirma lo dicho, “la cosa está como dormida, ellos (los taxistas de Jerez) están pendientes de conversaciones con Sevilla, están a la espera, por eso ahora ya no se meten con nosotros y podemos llevar a cabo nuestro trabajo con tranquilidad”. Este taxista espera que la Junta de Andalucía realice un estudio sobre la situación, para “saber si es verdad o no lo que se cuenta desde cada sector, y es que ahora todo lo que se sabe es de oídas, y la Junta culpa a los ayuntamientos y éstos a la Junta… hay que crear unas estadísticas serias y lo tiene que hacer la Junta porque los ayuntamientos no serían imparciales”.
Para crear este informe estadístico “podrían utilizar nuestras hojas de ruta y las tarjetas de transportes, que tienen datos sobre los pasajeros, los vuelos, los horarios, etc, y así al menos servirán para algo” y es que nadie puede olvidar que “somos como empresas autónomas, cada uno tiene sus intereses, y los intereses de uno suelen chocar con los de otros”.
Este taxista cree que la tranquilidad también ha llegado gracias a que “a comienzos del presente mes cambió la directiva de la asociación de taxis de Jerez, la cual ha arrinconado a los cuatro gamberros que fueron los que la liaron. Ahora parece que hay más cabeza y que se intenta resolver esta situación por vías que no son las amenazas, la violencia y las coacciones”.