El consejero de Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, ha animado este jueves a PP-A, PSOE-A e IULV-CA a iniciar un diálogo constructivo  para consensuar un acuerdo por la regeneración política en Andalucía, que permita recuperar la confianza de la ciudadanía en sus instituciones y representantes.

   Durante su intervención en comisión parlamentaria, el consejero
ha explicado que este compromiso de los partidos contribuiría a imprimir "ejemplaridad a la vida pública de los responsables públicos y fomentaría los valores que constituyen la ética en la sociedad a fin de recuperar la confianza de los ciudadanos en los políticos y en la política".

   Para Jiménez Barrios, este compromiso es necesario dado el "difícil momento que atravesamos", caracterizado por "una crisis política e institucional que está cimbreando la confianza de la ciudadanía en sus representantes y en sus instituciones democráticas". En su opinión, esto ha generado "una profunda desafección y un terrible desencanto de los ciudadanos en la política como herramienta para la solución a sus problemas".

   Por este motivo, ha señalado la necesidad, "de manera imperiosa, del establecimiento de nuevos mecanismos que incrementen la implicación política ciudadana y un mayor control de los representantes, más allá de la rendición de cuentas de las elecciones de cada cuatro años".

   Así, ha defendido el compromiso de la Junta con la "mejora de la relación entre la política y la ciudadanía a fin de ganar en democracia". Ha señalado que, con este fin, el Ejecutivo andaluz ha puesto en marcha "un amplio abanico de medidas y actuaciones para avanzar en transparencia, así como para reforzar el control y la supervisión de la gestión de lo publico por parte de este Ejecutivo".

   A este respecto, ha subrayado que "la Junta, desde el inicio de esta legislatura, ha tenido el compromiso de hacer que la transparencia se convierta en un principio rector de la administración, tanto en el acceso a la información, como en el establecimiento de nuevos mecanismos de participación ciudadana", lo que ha llevado a la elaboración de una Ley de Transparencia "avanzada" y que provocará "un cambio cultural en la sociedad y en el seno de la Administración".

   Jiménez Barrios ha confiado en que esa norma, que la próxima semana será sometida al debate de totalidad ante el Pleno del Parlamento, sea consensuada al máximo por los grupos durante su tramitación, para que sea "más robusta" y otorgarle vocación de continuidad y de permanencia en el tiempo. Jiménez Barrios ha señalado que la corrupción es, sin duda, uno de los factores que más ha contribuido al deterioro de la imagen de la política ante la ciudadanía, si bien ha estimado que debería dejar de ser un "arma arrojadiza" entre los partidos.

   Durante su comparecencia, también ha lamentado que, ante el pacto nacional por la regeneración política que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, planteó al jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, en la reunión que mantuvieron en de octubre de 2013, solo haya habido, hasta ahora, la "callada por respuesta".

PP-A SUFRE EL "YUGO DEL OSCURANTISMO"

   Por su parte, el diputado del PP-A Daniel Castilla ha querido dejar claro que desde su partido se ha apostado, desde un principio, por la transparencia y la regeneración democrática y ha indicado que la futura Ley de Transparencia de Andalucía podía haber llegado a la Cámara autonómica con muchísimos más apoyos de los grupos políticos, si bien no se ha apostado por ese "consenso".

   En cualquier caso, ha señalado que el PP-A va a trabajar en enriquecer ese proyecto de ley y ha indicado que el Gobierno andaluz no se ha caracterizado hasta ahora por la transparencia, ya que no facilita la información sobre determinados expedientes que le demanda el grupo popular. "Los parlamentarios del PP-A estamos sufrimos el yugo del oscurantismo por parte de la administración andaluza", según ha indicado Castilla, quien ha confiado en que mientras la norma llega, el Ejecutivo ya empiece a dar ejemplo en materia de transparencia.

   La diputada del PSOE-A Rosa Torres ha indicado que la Junta ha  demostrado su voluntad de someterse a la "disciplina democrática" que obliga a dar más información y a poner en marcha cauces de participación de la ciudadanía. Así, ha destacado que ha puesto sobre la mes una Ley de Transparencia de Andalucía, que es avanzada, valiente y que tiene como objetivo que "donde haya dinero público tiene que haber transparencia".

   Ha indicado que todos los representantes públicos están obligados a ser transparentes y ha recordado que los diputados del PSOE-A han hecho públicas sus declaraciones de IRPF, con lo que ha confiado en que los del PP-A también den ese paso. Ha confiado en que ese partido reconozca los avances y se sume de verdad al apoyo a la transparencia, que es el mejor instrumento para generar prestigio y credibilidad política.

   El portavoz de IULV-CA, José Antonio Castro, ha considerado que aún queda camino por recorrer en la lucha contra la corrupción, que hoy está "blindada", con lo que ha pedido al Gobierno andaluz más implicación para avanzar en ese sentido, y ha lamentado que el PP-A utilice este asunto de manera permanente para "erosionar al adversario". A su juicio, aparte de ese "espacio donde nos demos los palos", por parte de los tres partidos hay que intentar encontrar un espacio para mostrar ejemplaridad ante la ciudadanía.

   Castro ha puesto en valor que el Gobierno andaluz, para hacer frente a ese desapego de la ciudadanía hacia la política, asume las cuestiones que están mal, plantea y analiza las cuestiones que tienen margen de mejora y se pone manos a la obra, mientras ha mostrado su preocupación por el retroceso en derechos sociales que se está produciendo en este país, lo que afecta a la calidad de la democracia, con la Ley de Seguridad Ciudadana que ha planteado el Ejecutivo nacional como un claro ejemplo.