Anoche se emitió el concierto más íntimo de Miley Cyrus en MTV. Una actuación de las denominadas por la cadena de música como Unplugged y que tiene como característica el cantar en un espacio reducido -para lograr ese aspecto íntimo con el cantante- y sobre todo en directo.
La exchica Disney supo defenderse muy bien en sus actuaciones y contó con sus particulares extravagancias, aunque en menor medida. Una actuación de corte country ya que la cultura del lejano oeste se palpaba por todos los lados, incluyendo el vestuario de la propia Miley. Para la actuación que apenas duraba unos 40 minutos, contó con un par de atuendos, el primero de ellos de corte retro, un mono en cuadritos blancos y negros, que no escatimaba en detalles para convertir a Miley en una auténtica vaquera.
Un pañuelo anudado al cuello, un cinturón de pedrería para darle un toque moderno y por lo que parece una peluca rubia con un peinado clásico -aunque acabó despeinado por la propia actuación- complementaron dicho outfit, además de un pequeño bolsito vaquero y unas botas en color blanco.
Por otro lado, su segundo look fue algo mucho más de su estilo, es decir, mostraba algo más de su estilizado cuerpo -aunque luego dice que no le encanta estar desnuda las 24 horas del día- el modelito no dejaba mucho a la imaginación en lo que a la parte del torso se refiere. Contando con una chaqueta vaquera holgada y desabrochada, sujetador y pantalón de la misma tela vaquera, aderezado con un sombrero de cowboy, complementaban este look.
UN CABALLO GIGANTE, UKELELES, TABLAOS Y MADONNA
Dejando de lado el estilo de Miley, en lo que respecta al propio concierto, aparecieron algunas de sus extravagancias como un par de personas, disfrazadas de un caballo, donde Miley Cyrus cabalgó durante alguna de sus actuaciones. Como el concierto era de estilo country, la madera en el escenario era la autentica protagonista, como si de un autentico "Saloon" se tratase.
Por otro lado, los instrumentos del viejo oeste estaban presentes, por lo que no podía faltar el omnipresente ukelele. Panderetas, y demás escenografía western acompañaron en todo momento a Miley Cyrus durante su actuación, que contó con una invitada sorpresa, aunque más bien lo medios se encargaron de convertirlo en un secreto a voces, Madonna.
La Reina del Pop se calzó sus mejores galas country en color negro para hacer un dueto -impensable hace meses- con Miley. Ambas interpretaron un 'mash up' de los temas Don't Tell Me, perteneciente a la ambición rubia y We Can't Stop, tema incluido en el último disco de Cyrus. Ambas tuvieron una actitud sensual, se complementaron muy bien sus voces, las dos dieron la talla en una actuación y como no, no pudo faltar el famoso, ¡twerking!
Y es que la Ciccone se atrevió a hacer este paso puesto de moda por la exchica Disney. Por último, te dejamos el link para que disfrutes de todas las actuaciones al completo de los temas que interpretó Miley: 4x4, SMS (Bangerz), Do My Thang, Get It Right, Adore You, Drive, Rooting For My Baby y Wrecking Ball, además de la actuación sin interrupciones gracias a MTV.