Un zumbido, un chirrido metálico o algo similar al arrastre de muebles en plena noche es lo que varios gaditanos percibieron en la madrugada del 7 de enero sin explicarse muy bien de qué se trataba el asunto.
El fenómeno conocido como The Hum, literalmente, “zumbido”, aparece como un extraño ruido, similar al de un motor que parece escucharse en la lejanía, principalmente por la noche, y que de vez en cuando surge en diversas localidades de todo el mundo desde los años 40, fecha en la que se comenzaron a documentar los primeros casos.
Y es ahora cuando se ha dado en Cádiz. De hecho, Andrés González, gaditano de 37 años, carpintero de profesión y residente en la calle Doctor Dacarrete de la capital es una de las personas que sintió el hum, fenómeno si no paranormal, sí excepcional.
“Entre las 4.30 y las 6.30 horas del día 7 de enero empecé a sentir unos extraños sonidos que me despertaron. Y como seguían los fui grabando con mi móvil”, señala.
“Al día siguiente me puse a indagar si había más personas que, como yo, habían oído lo mismo y así fue. He logrado contactar con alrededor de veinte personas que escucharon el zumbido esa misma noche. Las hay que viven en el Mentidero, en el Campo del Sur o en la calle San Pedro, por ejemplo, pero no así en la zona de Puerta Tierra. También en Puerto Real y Río San Pedro hubo quien lo oyó poco antes de que se escuchase en Cádiz, alrededor de las 3.30 horas de ese día”, afirma González, quien una vez recabada más información sobre el zumbido señala que “hay quienes le llaman Trompeta del Apocalipsis o del Juicio Final, hay quienes dicen que se asemeja al ruido causado por el movimiento de una grúa o el del desgaste de una pieza metálica. Lo cierto es que a mí me sobresaltó y mucho más a las mascotas. Yo tengo una cobaya que se pasó todo el día inquieta y hay quienes oyeron el hum y tienen perros o gatos y corroboran lo mismo”, finaliza González.
Zumbidos y reflexiones nada comunes
Cierto es que el llamado Hum trae a la memoria aquella frase lapidaria que en los años 90 podía contemplarse por muros y fachadas de los aledaños de la carretera nacional 340 y que rezaba algo así como “si te sumba el oido te escuchan con laser la Nasa” y ahora, quienes sintieron en el centro de Cádiz el hum en la madrugada del pasado martes, pueden que comprendan y mucho a aquel grafitero que libraba su particular batalla contra el ente espacial norteamericano.