El PSOE-A ha considerado que UGT-A tiene que corregir los "errores" que se hayan podido cometer en relación con el uso de los fondos públicos y "cambiar lo que haya que cambiar para que no vuelvan a darse situaciones" como la vivida con el caso de las facturas.
En declaraciones a Europa Press, el portavoz del PSOE-A en el Parlamento, Mario Jiménez, ha rechazado, no obstante, una investigación en el Parlamento sobre ese asunto, como demanda el
PP-A, porque esa institución no puede convertirse "en una sala en paralelo" a la del juzgado de instrucción número 6 de Sevilla, que es lo que, a su juicio, pretenden los populares.
El portavoz socialista ha criticado la actitud ante este asunto del Partido Popular, al que, según ha recordado, "no se le ha ocurrido llamar a comparecer a Luis Bárcenas" ante el Parlamento nacional.
Jiménez ha instado al PP-A a que si considera que ha habido un "comportamiento indebido en la administración de recursos públicos, vaya a los tribunales y no pretenda convertir al Parlamento en una sala en paralelo a la del Juzgado de Instrucción número 6".
Ha lamentado esa actitud permanente del PP-A de tratar de "judicializar la política y de politizar la justicia".
Jiménez ha considerado que, sin duda, el asunto de las facturas
va a tener "un coste" para UGT-A en términos "de crédito ciudadano", pero se ha mostrado convencido de que el sindicato, que tiene "cimientos firmes" y ya ha pasado por otros momentos difíciles, "va a salir adelante", con una nueva dirección que va a representar perfectamente a la organización, que es un "interlocutor indispensable" en el diálogo social.
En este punto, ha querido dejar claro que lo sucedido en relación con las facturas "no invalida a UGT-A" como interlocutor social ni cuestiona la concertación social como instrumento indispensable a la hora de planificar la actividad económica en la comunidad.