La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha asegurado este jueves que pondrá en marcha el Instituto Público de Crédito con la intención de facilitar la financiación a las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la comunidad y, además, ha rechazado "dar por perdidos" los 40.000 millones de euros del rescate bancario y que todos los españoles llevan pagando desde hace dos años.
Así lo ha dicho en la sesión de control al Gobierno andaluz en el Pleno del Parlamento, donde ha insistido en que el Gobierno andaluz "no va a admitir de ninguna manera" que estos 40.000 millones de euros se "den por perdidos cuando los bancos van a obtener beneficios".
Sobre el también llamado Banco Público Andaluz por IULV-CA, Díaz ha señalado se creará con la intención de "llegar allí donde el mercado no llega", de coordinar todos los elementos financieros del Gobierno andaluz y de "aminorar las necesidades de liquidez" de estas empresas "permitiendo el sistema de compensación de deudas" que vienen reclamando estos empresarios.
La presidenta, que ha lamentado las "críticas de algunos a hacer uso público de los recursos para las pymes" mientras esos mismos "no han tenido problemas para utilizar esos fondos públicos en la capitalización del sistema financiero", ha insistido en que Andalucía "no se resigna" a las medidas puestas en marcha por el Gobierno de la Nación para salir de la crisis y que, en consecuencia, seguirá apostando por un nuevo modelo productivo y defendiendo que "no hay una sola salida" para la recuperación económica.
Díaz ha admitido que los emprendedores de la comunidad le han pedido facilidades para acceder al crédito y "menos trabas administrativas" --aspecto este último sobre el que la Junta "ya trabaja", ha recalcado-- y que, por ello, la Junta va a va a trabajar en respaldar y apoyar a las pymes, que son las que crean en torno al 80 por ciento del empleo. "Pero para eso hace falta que fluya el crédito. Porque sin crédito y sin financiación es imposible que la economía funcione", ha apostillado.
En este sentido, ha arremetido contra el Gobierno de Mariano Rajoy por haberse "dedicado exclusivamente a trabajar por la banca y despreocuparse de este tejido productivo" y también por la "gran mentira" que ha contado a todos los españoles "desde hace dos años" asegurando "que no pondríamos dinero a los bancos y lo hemos hecho a través de inyecciones de capital y de otros sistemas".
"Nos hemos endeudado todos para salvar a la banca y en los últimos días hemos escuchado que ya se dan por perdido 40.000 millones", ha dicho para rechazar esta opción que la Junta "ni comparte ni comprende" porque, según ha ejemplificado Díaz, no es posible decirle a "miles de trabajadores que están perdiendo derechos, trabajo y prestaciones sociales" mientras "hay un sistema financiero que va a hacer negocio y eso no va a repercutir en su vida".
Frente a ello, la Junta "va a hacer frente a estas circunstancias" tanto con la puesta en marcha del mencionado Instituto Andaluz de Crédito como con la aprobación, en la primera quincena de diciembre, del plan de apoyo financiero a las pymes industriales, dotado de 150 millones de euros.
PSOE-A PIDE APOYO AL PP-A
En esta misma línea, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Mario Jiménez, ha asegurado que "una de las dificultades más importantes del tejido empresarial andaluz" es el acceso al crédito y a la financiación y, ante ello, ha pedido al PP-A que "apoye y respalde" a los autónomos y emprendedores de la comunidad defendiendo junto al Gobierno andaluz las medidas actuales y futuras de la Administración autonómica para este sector.
Tras insistir en que es "indispensable" que el crédito vuelva a fluir en España y en Andalucía, Jiménez, en la que ha sido su primera intervención en el Pleno de la Cámara autonómica como portavoz de nuevo del PSOE-A tras el nombramiento de Francisco Álvarez de la Chica como senador, ha criticado las "desacertadas medidas del Gobierno de Rajoy" para con las pymes.
"Todo esto está haciendo agonizar a las pymes y provocando el cierre de empresas", ha censurado Jiménez, quien ha contrapuesto esta "realidad" a los "más de 100.000 millones de euros que el Gobierno ha inyectado a los bancos". Es por eso que ha exigido al Ejecutivo de la Nación que obligue a los bancos a "pagar la cuenta de los bancos" y no a los ciudadanos con recortes en sanidad, educación o servicios sociales.
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