La alfombra roja de los American Music Awards se tiñó de elegancia y es que las celebs decidieron sacar sus mejores prendas, aunque algunas más provocativas que otras. Lo que si destacó fue la polaridad que hubo entre las que prefirieron escoger la elegancia del negro frente a la frescura del blanco. Y como no, hubo excepciones dando un toque de brillo y de color a la noche.
LAS DE NEGRO
Y las que escogieron el negro fueron nada más y nada menos que las cantantes, Rihanna, Katy Perry, Ke$ha, la actriz Naya Rivera y la modelo Heidi Klum. La cantante de Diamonds se decantó por un top, que más que un top, era una especie de sujetador que cubría sus pechos con toques brillantes en lentejuelas negras. Al igual que ocurría con la parte de abajo, compuesta por una falda que mezclaba dos estilos. La parte de arriba igual que el top, parecida a una minifalda, de la que caía un encaje, dejando a la vista de todos las impresionantes piernas que se calza la de Barbados.
Por otro lado su incondicional amiga Katy Perry, prefirió ir mucho más recatada con un vestido largo de Oscar de la Renta, eso sí también en negro aunque el toque de color lo puso las flores que llevaba bordadas al igual que los miles de lunares blancos que lucía el traje. Por otro lado, Ke$ha dejó de lado el gamberrismo, su marca de personalidad, para decantarse por la elegancia. También en negro, el vestido tenía un volante recogido hacia la cintura, revelando una gran abertura donde la cantante lucía pierna. El toque de color lo puso su pelo tricolor en azul, lila y rubio.
La actriz Naya Rivera se ha llevado la palma en cuanto a elegancia se refiere, gracias al llevar un vestido del diseñador neoyorquino Michael Kors. Con una pequeña cola y esa parte de arriba de infarto, dejando poco lugar a la imaginación, la actriz de Glee acaparó miradas. Por último la modelo Heidi Klum, lució un vestido algo más arriesgado de Marchesa, ya que nos recuerda a un conjunto de lencería gracias a esos encajes. Destaca el detalle de los flecos que alargan aún más el vestido.
LAS DE BLANCO
Las que optaron por este color fueron Miley Cyrus, Christina Aguilera y la recién descubierta Kendall Jenner, hermana de Kim Kardashian y de la que se rumorea que podría estar acercándose poco a poco a Harry Styles, ya que a ambos jóvenes se les vieron juntos saliendo de un restaurante. Dejando de lado la vida amorosa, las tres eligieron la pureza del blanco.
Miley Cyrus muchísimo más recatada que en otras ocasiones, lució un traje chaqueta, eso sí el toque descarado lo puso al no llevar nada debajo de la chaqueta. Destacan también los detalles de los imperdibles en dorado que estaban situados tanto en los bajos del pantalón como en uno de los laterales de la chaqueta.
Christina Aguilera optó por un vestido largo y con mangas, que realzaba su increíble figura y es que en esta ocasión, la cantante de Your Body ha vuelto a adelgazar y esperemos que esta vez mantenga la figura, ya que le queda de escándalo y más al ver su cintura gracias a dos pequeñas aberturas a los lados del propio vestido. Una elección acertada y muy elegante, que la coloca junto a Naya Rivera en cuanto estilo y glamour.
Por último la hermana de Kim Kardashian, Kendall Jenner también se decantó por el blanco, en un dos piezas, compuesto por un top asimétrico y una falda también de corte asimétrico. Y es que la joven de 18 años puede presumir de cuerpo, al igual que lo hace su hermana. Aprendiendo de las costumbres familiares.
LAS QUE PREFIRIERON EL BRILLO Y EL COLOR
Indudablemente, otra de las que destacó por arriesgar en un color diferente al blanco y negro reinante fue Taylor Swift. La cantante de country quiso lucir un vestido corto en color dorado de Julien Macdonald. Destaca la cantidad de brillo y lentejuelas que llevaba pero eso sí logró deslumbrarnos a todos ya que fue uno de los looks que acaparó todos los flashes. Y siguiendo la estela de Taylor Swift nos encontramos con la actriz y cantante Ariana Grande.
La estrella de Nickelodeon se enfundó un traje de Dolce & Gabbana en lentejuelas rojas deslumbrando también a todos. Eso sí, fue algo más refinado que el que ha lucido Taylor Swift, más desenfadado y causal.
La actriz de American Horror Story, Emma Roberts junto a Kelly Osbourne optaron por el plata. La primera de ellas con un vestido con escote palabra de honor en un plateado brillante, la segunda prefirió lucir un vestido largo de gasa y volantes con mangas que aunaba el blanco, situado en la parte de abajo y el palta gracias a los detalles de la parte de arriba.
La que puso el toque de color con su vestido de Versace ha sido Lady Gaga. Dejando de lado su corcel blanco, la neoyorquina quiso lucir el vestido que también lleva puesto en las imágenes promocionales de la firma italiana. Como si de una jovencísima Donatella Versace se tratase, Lady Gaga también acaparó miradas ya que dejó de lado sus extravagancias para mostrarse más glamurosa y elegante.
Por último destacar a la actriz Zoe Saldana que fue una de las pocas que quiso combinar los dos colores protagonistas de la noche, el blanco y el negro, gracias a un vestido largo de Roland Mouret, que incluía dichos colores gracias a un original estampado.
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