Insinuar pero no enseñar. Una premisa a la hora de vestir que en ocasiones deriva en la vulgaridad por lo difícil que puede resultar conseguir encajar transparencias con 'no mostrar'.
A la hora de optar por una prenda con transparencias hay que determinar bien los límites. Es preferible que sea un toque sutil a pasarse de la ralla. Claro está que cada una pone sus barreras por ello los diseñadores se encargan de ofrecer una gran variedad de formas dentro del juego de las transparencias.
Si la idea es llevar la parte superior del torso 'al descubierto', hay que tener muy en cuenta la ropa interior. Es preferible combinarlo con un sujetador del mismo tono para disimularlo o si lo prefieres y la genética se porta bien contigo, no llevar nada. Las celebridades son las más arriesgadas en cuanto a transparencias y a más de una le han jugado una mala pasada como a Elsa Pataky.
Las faldas con transparencias es una tendencia que continúa pisando fuerte. Dejar entrever las piernas, hasta un punto claro, connota sensualidad, es un atuendo sugerente para una fiesta de noche o de para una alfombra roja. Puedes darle un toque más arriesgado a cualquier prenda, como hizo Eugenia Silva en Cannes con un vestido negro de corte romántico.
Faldas cortas y largas, vestidos, camisas, camisetas y pantalones, todo es aceptable, solo hay que acordarse de caer en la tentación y no pecar demasiado.