Esta conclusión se extrae de los más de 1.500 folios de los que constan las diligencias previas que se siguen en el Juzgado 19 contra la empresa que explota Cobre Las Cruces por contaminación con arsénico del acuífero Niebla-Posadas, del que bebía la localidad sevillana de Gerena, con motivo de los trabajos de excavación de la corta de la mayor mina de cobre a cielo abierto de Europa.
Una de las principales condiciones impuestas a Cobre Las Cruces para poder instalar su sistema de drenaje-reinyección del acuífero era establecer la figura de un Hidrogeólogo Residente como responsable del autocontrol de las operaciones.
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