En la tarde noche del pasado lunes, uno de los músicos más importantes de las últimas décadas en España, Miguel Ríos, presentó su libro de memorias en las instalaciones de la Biblioteca Infanta Elena de Sevilla. La obra, titulada Cosas que siempre quise contarte, es un relato vital de uno de los cantantes de rock más grande de todos los tiempos. El granadino nos sorprende con deliciosas historias de su propia existencia, su vida y, también, de la historia del rock en este país.
Cosas que siempre quise contarte es mucho más que el libro de memorias de Miguel Ríos. Desde hace dos años, cuando el popular artista abandonó los escenarios con su último concierto en Guanajuato, México, ha estado dedicado a escribir esta obra.
Son memorias, sí, porque lo que se cuenta es verdadero, pero podría ser una novela porque sus páginas son una trepidante, imaginativa y fecunda obra de ficción. Y no es que el autor sea un exagerado, es que su vida ha sido extraordinaria y cuando se pone a contarla lo hace sin autocomplacencia, y con enorme frescura.
Es una obra que afronta amores y desamores, triunfos y batacazos; la amarga experiencia carcelaria; los viajes iniciáticos a Madrid, Barcelona, Canadá, Tokio, Estados Unidos, México, Venezuela; las peleas con los representantes; las disputas con los concejales cutres y el empresario tacaño; el mundo de las drogas y la música. Siete décadas de existencia y más de medio siglo de rock dan para mucho.
En palabras del propio Miguel Ríos, esta obra tiene un objetivo meridianamente claro y difícil: “el libro de un tipo que quiere contar en trescientas y pico páginas una vida de 50 años”.
En el acto, presentado por Mercedes de Pablos, se mostró crítico con la actual situación que vive y sufre la música, y dijo: “Si la cosa sigue así los músicos dejarán de ser profesionales y se convertirán en aficionados, y nunca se logrará que el arte y la emoción de la creación sigan evolucionando”.
Para matizar después con estas palabras: “Ya todo el mundo se puede bajar todo y ya no hay mecenazgo que resista para que el artista pueda seguir trabajando en su inspiración para seguir haciendo una obra coherente”.
Este libro es la consecuencia de un esfuerzo por parte del cantante, que le ha llevado a escribir durante cinco horas diarias desde enero de 2012 hasta finales de marzo de 2013.
Además de agradecer a numerosas personas su aportación a su vida y a su carrera, Ríos tuvo unas especiales palabras para con uno de sus productores fetiche y gran amigo personal, el chileno afincado en España, últimamente en Sevilla, Carlos Narea, que no faltó a la importante cita al igual que su mujer Regina y gran parte de su familia.
nicosalaseventos.blogspot.com.es
