La consejera andaluza de Hacienda, María Jesús Montero, ha dicho hoy que a la Junta "no le queda grasa para seguir adelgazando", lo que obligará a revisar las partidas para que el recorte del gasto consignado a Andalucía en los presupuestos del Estado de 2014 no repercuta en los pilares del estado del bienestar.
En rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, ante el que ha presentado un informe sobre la repercusión de los Presupuestos del Estado en Andalucía, la consejera ha asegurado también que la intención es que los salarios de los empleados públicos no sufran "disminuciones añadidas" a las del 2013, pero ha dado prácticamente por descartada la posibilidad de que se reponga en 2014 el complemento de la paga extra.
"Estamos tremendamente preocupados, las previsiones se tendrán que hacer con este complicado escenario" de los Presupuestos del Estado para el 2014 y que obliga a la Junta a hacer "un presupuesto al límite", ha subrayado Montero.
Así, ha recordado que el margen de déficit establecido para el 2014 es del 1 % del PIB -frente al 1,58 % de este año- lo que obliga a Andalucía a un ajuste adicional del gasto de 812 millones de euros.
"Hay que revisar todas las partidas que componen el presupuesto porque hay que quitar 1.200 millones del gasto", ha recalcado Montero en referencia a los citados 812 millones, además de los 350 millones menos que se estima que la comunidad recibirá de los anticipos a cuenta del sistema de financiación autonómica y 45 menos del Fondo de Compensación Interterritorial.
La consejera ha descartado discrepancias entre los socios del Gobierno de coalición en la elaboración del proyecto de presupuestos, que ha asegurado que será remitido "en plazo" al Parlamento, aunque ha indicado que siempre que se elaboran las cuentas se producen "tensiones" incluso entre los distintos departamentos de la Junta porque los fondos son limitados, lo que "entra dentro de la normalidad".
Respecto al empleo público, ha recalcado que las cuentas andaluzas se elaborarán con dos premisas: la menor pérdida de empleo público posible y que no disminuyan sobre lo ya recortado las retribuciones salariales.
Tras advertir de que "la mejor manera de recortar el estado del bienestar es a partir de la asfixia a las comunidades autónomas", en referencia al presupuesto del Estado del 2014, Montero ha vuelto a quejarse de que a Andalucía no se le ha consignado la inversión que le corresponde en función de su población, de forma que la deuda acumulada por el incumplimiento de esta disposición estatutaria asciende a 2.247 millones de euros.
