El secretario de Organización de UGT-A, Manuel Ferrer, ha advertido de que si se bajan los sueldos aún más "los trabajadores andaluces no tendremos "ni para comprar marcas blancas", ante las declaraciones el vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn en apoyo a la propuesta del FMI de bajar los salarios en España un diez por ciento más.
En una nota, Ferrer advierte de que "si seguimos empobreciendo a los andaluces, dentro de poco no vamos a tener ni para comprar las marcas blancas de los supermercados".
Ha recordado que el descenso del nivel adquisitivo de los andaluces se ha materializado en un 7,4 por ciento en 2010, 7,6 por ciento en 2011 y un 8,1 por ciento en 2012, de forma que "desde que comenzó la crisis, los andaluces somos un 20 por ciento más pobres".
"Sería una bajada salarial por decreto, en todos los ámbitos, desde los empleados públicos o los convenios colectivos", ha asegurado Ferrer, que ha precisado que el salario medio en Andalucía está en unos 1.100 euros, y ha apuntado que más del 50 por ciento de los andaluces cobra menos de 1.000 euros. "Si a un mileurista le quitas un 10 por ciento de su salario, lo dejas prácticamente en el Salario Mínimo Interprofesional", continúa el sindicalista.
Ha recordado que en 2012 "la renta del trabajo cayó un 5,5 por ciento a nivel nacional, mientras que la renta del capital subió un 2,2 por ciento, lo que significa que en la ganancia de los empresarios lo que prima es la exportación", aduce el sindicalista. Apunta que "cuanto más bajan los salarios, más barata es la exportación.
"Los empresarios están ganando más a costa de los trabajadores, y en Europa lo que quieren es que los países del sur nos convirtamos en proveedores baratos para los países del norte, que caigamos en el modelo asiático tipo China", explica el secretario de Organización de UGT-A.
Advierte de que esta medida "tendría especial hincapié en Andalucía, donde nuestro modelo productivo está muy influenciado por el consumo interno del resto del Estado, ya que se basa fundamentalmente por el sector servicios". "Para nuestra comunidad supondría otro bajón importante en el empleo si el consumo nacional retrocede de nuevo", asegura Ferrer.