El vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, ha descartado este miércoles que el Gobierno andaluz vaya a realizar una prórroga de los actuales presupuestos, tal y como ha anunciado Cataluña, para evitar nuevos ajustes consecuencia de la reducción del déficit al uno por ciento para el ejercicio de 2014.
En declaraciones a Canal Sur Radio, recogidas por Europa Press, Valderas ha garantizado que Andalucía tendrá Presupuesto el próximo año, aunque sí prevé unas cuentas "complicadas y difíciles". En su opinión, habrá que "priorizar bien, repartir mejor, y codecidir con la sociedad en elementos como la política fiscal progresiva".
El dirigente de izquierdas, que ha afirmado que las prioridades del Presupuesto de 2014 serán la salud, la educación y los servicios sociales, ha insistido también en la necesidad de caminar hacia una política fiscal de solidaridad que mejore los recursos públicos. "Deben pagar más quienes más tienen", ha añadido.
Tras asegurar que la Junta tendrá que hacer uso de la "creatividad" para hacer los Presupuestos de 2014, Valderas ha precisado que a finales del presente mes se producirán reuniones en el Gobierno andaluz para abordar los Presupuestos, que irán en paralelo con el proceso de investidura.
Preguntado por el hecho de que la Comisión Europea haya apoyado la propuesta del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la bajada de los salarios en España un diez por ciento, el vicepresidente de la Junta ha asegurado que ambas instituciones son "insaciables" y ha criticado que piensen que aún es posible "más presión y estrangulamiento a los trabajadores".
"No se quieren dar cuenta de que están hundiendo a una economía ya maltrecha y de que si los salarios bajan y el desempleo sube, no se activa el consumo y no se reactiva la economía", ha defendido Valderas, quien considera que "claramente" se necesita ir hacia el camino contrario de lo planteado por estas instituciones.
En su opinión, lo que hay que tocar no son los salarios de la mayoría social, sino los sueldos de aquellas personas, fundamentalmente quienes dirigen los mercados, que tienen sueldos por encima de los 100.000 euros anuales.
