Andalucía

Griñán no repetirá como candidato porque se necesitan "nuevos pilotos"

Pide al PSOE-A asegurar la "sucesión de las personas" para garantizar la "continuidad de un proyecto que siempre supo mirar al futuro"

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  • Díaz y Griñán -

El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, ha cerrado su intervención en el Debate sobre el Estado de la Comunidad haciendo oficial su decisión de no repetir como candidato en las próximas elecciones autonómicas porque considera que se necesitan "nuevos pilotos para nuevos horizontes" asumiendo el compromiso de seguir "al timón de la nave" del Ejecutivo andaluz "durante esta legislatura".

   Junto a ello, ha propuesto al PSOE-A que estudie la conveniencia de limitar a dos el número máximo de mandatos del presidente de la Junta con voluntad de que dicha regla se pueda establecer de forma "general y estatutaria".

   "No me limito a comunicar una decisión personal. Quiero ser coherente con mi convencimiento de que nuestro país, y desde luego Andalucía, necesita remover todo lo necesario para revitalizar sus motores y la política no es un mero motor auxiliar de la sociedad, es el motor que nos puede hacer volar más alto", ha defendido el jefe del Ejecutivo andaluz, antes de señalar que "sólo nuevos pilotos nos llevarán a nuevos horizontes".

   Griñán ha defendido la necesidad de que haya un "empuje renovado" en un "tiempo nuevo para el que no van a servir viejas recetas del pasado" y ha asegurado que durante los cuatro años "de intensidad poco común" que lleva al frente de la Junta ha "intentado sostener el timón en los peores momentos para que la nave no se desviara", algo que, según ha querido dejar claro, "seguiré haciendo durante esta legislatura".

   En su opinión, "la política tiene que ver con las personas y con el futuro y no sirve cuando mira al pasado ni cuando no es capaz de mirar de frente a las personas para defenderlas, representarlas y hacer realidad sus aspiraciones", ya que considera que "cualquier servicio público, cualquier oficio se anquilosa y envejece si no se produce a tiempo la incorporación de savia nueva, capaz de recoger el testigo y avanzar en la carrera".

   "Esa es la vida y el fluir lógico y deseable de todas las generaciones, que deben aspirar a mejorar lo que recibieron, y lo mismo ocurre con la política. Un proyecto político de largo alcance tiene que renovarse permanentemente", ha insistido Griñán, que ha reivindicado la labor de su generación en la Transición, "que resultó un éxito en términos históricos", pero "no desde la nostalgia, sino como ejemplo de cómo se pueden renovar los actores políticos, cambiar la política y construir un país", ya que ha recalcado que "no puede ser que la sociedad cambie, que los retos cambien, que los problemas sean nuevos y que los dirigentes de un proyecto social, político o económico no sean solidarios con ese cambio".

   "Soy presidente de la Junta desde hace algo más de cuatro años. No es mucho en términos meramente cronológicos, aunque sin duda ha sido un periodo de una intensidad poco común. He intentado sostener el timón de Andalucía en los peores momentos de la tormenta financiera con todas mis fuerzas para que la nave política y social de nuestra tierra no se desviara de lo que considero las esencias de nuestra voluntad colectiva: progreso y justicia", ha proclamado desde la tribuna, antes de comprometerse a "seguir haciéndolo  durante esta legislatura".

   Griñán ha expresado su deseo de lograr "una Andalucía con empuje renovado, con nuevos consensos para el futuro, que sepa interpretar bien las claves de este tiempo nuevo para el que ya no sirven las viejas recetas por mucho éxito que hayan tenido en el pasado", para lo que ha apostado por una comunidad "con empresas que tengan una visión moderna y competente de la economía, que incorpore nuevas inteligencias a la sociedad del conocimiento y dispuesta a defender lo que queremos conservar pero sin apego a lo que ya ha cambiado".

   "Los partidos deben asegurar la sucesión de las causas y, en el caso de mi partido, la causa histórica ha sido, y es, la lucha por la igualdad. Y ahora, con esta misma voluntad renovadora, le tocará asegurar otra sucesión, la de las personas, que debe servir también para la continuidad de un proyecto que siempre supo mirar al futuro desde el compromiso y la constancia", ha cerrado su intervención, tras la que se ha dirigido a su escaño y ha recibido el abrazo del vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, y de la consejera de la Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, entre los aplausos de la bancada socialista.

El análisis: Cuando las barbas de tu vecino veas pelar...

La decisión del presidente andaluz, José Antonio Griñán, de renunciar a ser candidato de nuevo en 2016 ha revolucionado hoy las filas socialistas y ha obligado a la dirección federal que lidera Alfredo Pérez Rubalcaba a emplearse a fondo para evitar que se convierta en un cataclismo que altere su hoja de ruta.

No en vano la federación andaluza es la más numerosa y la más potente del PSOE y sus avatares internos siempre han tenido trascendencia en el partido más allá de la "frontera" de Despeñaperros.

En Ferraz, no obstante, recuerdan que la idea de Griñán es continuar en la Presidencia de la Junta y del PSOE y dan por hecho que seguirán contando con su favor en la construcción del nuevo proyecto socialista y en los plazos para las primarias.

Aunque las relaciones entre Rubalcaba y Griñán han tenido muchos altibajos en el último año y medio, a nadie se le escapa que el respaldo del presidente andaluz ha sido determinante para evitar una rebelión en el PSOE, por ejemplo, después de la derrota en las elecciones autonómicas en el País Vasco, Galicia y Cataluña o tras la crisis de Ponferrada (León).

En varias ocasiones Griñán ha enfriado las aspiraciones de quienes piden un recambio inmediato en la dirección federal, ya sea adelantando las primarias para elegir al próximo candidato a la Moncloa, ya sea mediante un congreso extraordinario que nombre a un secretario general en sustitución de Rubalcaba.

La última, este mismo mes, cuando tras reunirse con él en Ferraz, Griñán consideró que las "primeras primarias" que se celebrarían en el PSOE serían para las elecciones autonómicas y locales de 2015, zanjando el enésimo intento de algunos "barones" de mover la silla al líder del partido.

Por eso, no ha dejado de sorprender su anuncio de hoy, que implicará con toda probabilidad que las "primeras primarias" sean finalmente las de los socialistas andaluces para elegir a su futuro cartel electoral.

Una decisión que contradice también los razonamientos que el propio presidente del PSOE empleó entonces: que las primarias deben celebrarse lo más cerca posible de las elecciones para las que se eligen los candidatos. Y los próximos comicios andaluces, si él no decide adelantarlos, son para 2016.

El relevo generacional que Griñán quiere impulsar en el PSOE-A coloca a Rubalcaba en una posición incómoda y da oxígeno a ese sector del partido que quiere cambios ya en la Ejecutiva y que se ha apresurado a sugerir que el secretario general debería tomar nota y seguir el mismo camino.

Tanto es así que ha sido inevitable escuchar a más de un diputado socialista no muy afín a Rubalcaba hablando del "efecto contagio" y echando mano del refranero: "Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar".

Más enigmática se ha mostrado quien fue contrincante de Rubalcaba en el congreso federal de Sevilla, Carmen Chacón, al elogiar la generosidad y la dignidad de Griñán y al subrayar el hecho de que haya pensado en un "relevo generacional".

Otros, en cambio, se han esforzado por diferenciar las situaciones, como ha sido el caso del ex presidente andaluz y del PSOE, Manuel Chaves, convencido de que la decisión de Griñán no condicionará la agenda de la Ejecutiva Federal.

El calendario previsto incluye un Consejo Territorial el 6 de julio en Granada, un Comité Federal el 13 de julio en Madrid y una gran conferencia política en octubre. Las primarias, para después de las elecciones europeas de 2014.

Desde Ferraz se empeñan en subrayar que la decisión de Griñán no trastoca para nada la hoja de ruta diseñada por la dirección federal y no se dan tampoco por aludidos sobre el "relevo generacional".

Rubalcaba tiene "contrato" con el partido hasta 2016 y, aunque hasta ahora se ha negado a desvelar si se presentará a las primarias, sus más cercanos dan por hecho que no lo hará pero no ven la necesidad de comunicarlo con tanta antelación.

Griñán, recuerdan desde Ferraz, tiene cinco años más que Rubalcaba, y en 2016 tendrá 70 años. ¿Una edad para empezar a pensar en la jubilación? 

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