El buen tiempo va a permitir honrar algunas de nuestras tradiciones, en concreto las cruces de mayo, que el fin de semana llenarán algunas plazas y rincones con esos símbolos y que han dado colorido a una fiesta arraigada, y que viven de un modo especial numerosos colectivos, que normalmente suelen ser los más comprometidos con el amor a nuestras raíces y con la promoción de los grandes valores de la ciudad. Es hermoso pasearse por las zonas, en diferentes lugares de la población, donde se dispondrán una treintena de cruces, que serán, asimismo, centros de fiesta, de reunión y de conversación en torno a estos altares en los que cada año se forma una rivalidad que no pretende la competencia en sí misma sino como garante del mantenimiento de esta tradición. Junto a las cruces de mayo, no hay que olvidar la presencia en las calles de las procesiones infantiles, en las que se involucran centros de enseñanza y otros colectivos, que salen a la calle portando los pasos de las imágenes, en una especie de Semana Santa chica, pero en la que los niños y niñas ponen todo el entusiasmo para lograr encandilar a los jienenses que asisten asombrados a un sugerente desfile de pasos y acompañamientos que constituyen una bonita estampa de la primavera jienense, que hay que cuidar y potenciar. Y por supuesto es obligado subrayar la gran labor que para todo lo que tiene que ver con la recuperación de nuestro mejor acervo cultural realiza la Asociación ‘Lola Torres’, que es el gran activo y el mejor garante de la defensa y promoción de nuestras costumbres y tradiciones.
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