El presidente de Unicaja Banco, Braulio Medel, ha eludido este miércoles confirmar si ha condicionado la adquisición del banco CEISS, creado por Caja España-Duero, a que se le den nuevas ayudas públicas, y se ha escudado en que la entidad no ha facilitado tal información. “No hay ninguna novedad”, ha dicho, apuntando que ante el el desenlace de la se encuentra en “un estado de confortabilidad natural”.
“Con la edad que algunos vamos teniendo el optimismo y el pesimismo se contrapesan y se queda en un estado de confortabilidad natural”, ha declarado Medel, que ha firmado un convenio de colaboración con la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM) para el desarrollo empresarial de la provincia.
No ha confirmado ni si la entidad que preside ha exigido unos 400 millones de euros para acometer la adquisición ni tampoco si la fecha fijada para cerrar este asunto es el próximo 30 de abril. Al respecto, ha indicado que “Unicaja se responsabiliza de aquellas informaciones que dice y no de cualquier otra que se publique”, entre ellas esa fecha tope.
Al ser cuestionado, en este punto, acerca de si Unicaja ha puesto condiciones, Medel ha hecho hincapié en que “toda negociación naturalmente se hace con arreglo a unos parámetros”.
“Hay parámetros internos, que no han cambiado, y externos”, ha afirmado, añadiendo que “la correspondencia de esos parámetros internos con la realidad naturalmente sí ha ido cambiando porque han cambiado los parámetros externos”.
Ha manifestado que el banco tiene “claro” que lo primero que hay que defender son los clientes de Unicaja.
Según fuentes del sector, Unicaja ha condicionado la compra de Ceiss a que se le den nuevas ayudas públicas para cubrirse ante posibles sobrevaloraciones en el traspaso de activos al “banco malo” y compensaciones por las participaciones preferentes.
De no llegar a un acuerdo en los plazos fijados, el grupo castellanoleonés será nacionalizado, con lo que previsiblemente acabaría siendo subastado al mejor postor.
Medel ha manifestado que, aunque “somos un banco, nunca queremos dejar de ser una caja”. “Ha habido una serie de modificaciones normativas que han obligado a reconfigurar el diseño institucional de las entidades financieras, pero queremos mantener muy vivos los elementos que definen el espíritu de actuación de una caja”, ha apuntado.
Más aún, ha insistido en el deseo de la entidad de “mantener un fuerte vínculo con su territorio” y de “ser la entidad de referencia para nuestra Comunidad Autónoma”; de hecho, “somos el único grupo financiero procedente de caja que sigue controlado por agentes andaluces”.
“No entra en nuestros objetivos -ha precisado Medel- irnos a lejos parajes fuera de España; otra cosa es que lleguemos a acuerdos de integración con otras entidades”.
Por último, el responsable de Unicaja Banco ha expuesto que “quien tiene claro que lo primero que hay que defender son los intereses de los clientes es esta entidad”. “Nadie nos va a dar lecciones” en este sentido, ha apostillado.