Andalucía

Una madre se hace pasar por su hijo para capturar a un acosador sexual

El encartado contactaba con el menor a través de un juego ‘on line’, se ganaba su confianza y empezaba a hablarle sobre prácticas sexuales y a instarle a realizarlas

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  • El acusado tenía antecedentes

Una madre se hizo pasar por su hijo en internet para averiguar datos sobre un hombre, un empleado de una tienda de informática con antecedentes por abusos y corrupción de menores, que había contactado con el menor y le había instado a realizar prácticas sexuales.

La Policía ha informado de que las investigaciones sobre este caso comenzaron gracias a que el menor contó lo ocurrido a su madre, que durante un tiempo se hizo pasar por su hijo en los sitios de internet en los que habían contactado con él, antes de denunciar los hechos en la Comisaría de Cádiz.

Según ha explicado la Policía, el menor contactó con el supuesto pederasta a través de un juego on line, en el que una persona desconocida que se identificaba como Madara Uchihack inició con él en una relación que al principio fue “muy cordial”.

Durante varios días coincidieron en el mismo juego y mantuvieron conversaciones normales, hasta que el hombre fue ganándose la confianza del menor, ofreciéndole como regalo la conexión de una pagina web de donde se podía descargar juegos o una cuenta de un programa de videoconferencias, que el menor nunca llegó a utilizar.

A partir de ese momento las conversaciones fueron haciéndose más personales e íntimas, ya que el hombre comenzó a interrogar al menor sobre prácticas sexuales y a instarle a realizar alguna de ellas.

Al verse amenazado, el menor comentó los hechos con su madre, que desde ese momento impidió que su hijo se conectara a internet y se hizo pasar por él para averiguar más datos sobre Madara Uchihack.

En estas conversaciones la madre descubrió que era un adulto, ya que le comentó que tenía unos treinta años y que regentaba una tienda de informática.

Como veía que su víctima no cedía ante sus insinuaciones obscenas, “comenzó a proferir insultos y amenazas, incluso de muerte, con el fin de intimidar al menor para que realizara las peticiones de prácticas sexuales”, explica la Policía.

El menor y su madre denunciaron los hechos ante la Comisaría de Cádiz y el grupo de Investigaciones Tecnológicas inició las pesquisas que han llevado a identificar al supuesto agresor como I.G.P., de 28 años y residente en un pueblo de Sevilla.

Los agentes descubrieron que el acusado, vinculado a distintas cuentas y redes sociales que usaba con el mismo fin y diferentes identidades, se conectaba a internet desde la empresa de informática donde trabajaba y a través de la conexión wifi de la casa de su vecino, cuya contraseña había desencriptado.

La Policía localizó a I.G.P. en el Hospital Psiquiátrico del Centro Penitenciario de Sevilla, donde había ingresado tras ser detenido por una reclamación judicial por el Juzgado de Instrucción número 1 de Lérida por abuso sexual.

Además, tenía varios antecedentes policiales, uno de ellos como autor de un delito continuado de corrupción de cerca de 50 menores a través de internet. En todas sus acciones utilizaba el mismo modus operandi: contactaba con los menores a través de redes sociales y juegos on line entablando amistad con ellos y ganándose su confianza con regalos para, después, entrar en conversaciones mas íntimas y comenzar su acoso y sus amenazas.

Al hilo de este caso, la Policía ha reiterado que la comunicación de los menores con los padres es la principal herramienta para prevenir y combatir estos casos.

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