Un recorrido en el que estuvo acompañado por Juan Martínez Osorio, administrador de la empresa granadina que está construyéndolo, quien indicaba que las obras se habían disparado hasta los siete millones de euros y que "las previsiones con las que trabajamos es abrir en el próximo 1 de marzo".
La construcción se encuentra ubicada en la parte de levante de la playa de Cotobro. Un proyecto que surgió hace cinco años y que se vio ralentizada por las dificultades planteadas desde Cultura, ante la aparición de restos arqueológicos, que mantuvo paralizadas las mismas algo más de un año. Tras diferentes intervenciones arqueológicas, donde se han encontrado los restos de una villa romana del siglo I después de Cristo, según manifestaba el arqueólogo, "se realizará una adecuada recuperación de los mismos, así como su puesta en valor para ser visitados y disfrutados por el público".
Ha destacado el promotor "la buena sintonía que ha habido en todo momento con el Ayuntamiento, con quien no ha habido ningún tipo de problemas".
Confiesa Martínez que "han puesto mucha ilusión en el proyecto", pues ya han pasado los problemas jurídicos tras la sentencia a favor del Ayuntamiento en el tema de la concesión de la licencia, así como la aparición de los restos, las dificultades con la Asociación de Cotobro, con las que tuvimos algunas dificultades, y por último los problemas con el nivel freático, que retrasaron la ejecución de la obra".
"Estamos realizando un hotel moderno, con un proyecto de decoración muy bonito, con una fachada con un sistema 'porcelánico' de colores que quedará muy bien, y unas instalaciones que entendemos son magníficas. Hemos descartado abrir para Navidad, pues sería precipitado, para abrir el 1 de marzo, con la intención de mantener abierto durante todo el año", ha informado el promotor del hotel. Preguntado por las necesidades de personal, señala que harán falta unas 25 personas, para lo que se decanta por un perfil de jóvenes, principalmente de Almuñécar, que formarían ellos a través de unos cursos que desarrollarán unos meses antes.
Una buena noticia, sin duda, para Almuñécar, como manifestaba el alcalde, Juan Carlos Benavides, necesitada de la concreción de proyectos económicos y turísticos, especialmente en la coyuntura de crisis a la que nos están condenando, tanto por el contexto general, como por el factor añadido de la estrategia de paralización socialista hacia algunos proyectos del municipio.
Destacaba Benavides la concreción del proyecto, "un edificio integrado perfectamente en el entorno, y una instalación de calidad, que tendrá como potenciales turistas a personas con un poder adquisitivo medio alto". Destacaba la importancia de la faceta cultural, con lo que estos restos se integrarán en los recorridos culturales que se desarrollan desde el Patronato de Turismo. También ha indicado la necesidad de contar con campos de golf, pues el segmento al que va dirigido este hotel, demanda este tipo de infraestructuras complementarias.
Dificultades
El hotel de cuatro estrellas "Playa de Cotobro" ocupa una superficie de 1.436 metros cuadrados en el acceso este de esta playa almuñequera. Se trata de un edificio de cuatro plantas, más bajo y sótano, en el que se incluyen 20 plazas de aparcamiento, pues se han perdido otras 12 como consecuencia de la aparición de los restos arqueológicos, y que contará con 64 habitaciones al público. En la parte delantera se instalará una piscina y zona ajardinada, mientras que en la parte posterior se complementa con pistas de petanca y sendas peatonales ajardinadas. En las excavaciones se encontraron una serie de restos arqueológicos, datados en la época romana. Entre los mismos aparecían los restos de un pozo y de edificaciones, que podrían corresponder a parte de una villa. Término este aún a la espera de confirmación en el estudio arqueológico definitivo que está elaborando Cultura. Unos restos datados en el primer o segundo siglo de nuestra era, existiendo parte de ellos en el sótano del hotel, que se podrán ver a través de unas claraboyas, y el resto en la parcela contigua, de titularidad municipal. Se trata de los restos de un pozo que fue construido en la época romana, aunque su uso inicial pudo haber sido una sauna o baños termales, con una piscina circular. Esta, previsiblemente, fue excavada con posterioridad, lo que ha permitido su uso como pozo hasta época actual.
Las 64 habitaciones se distribuyen a 16 por planta, y contará con jacuzzi en la terraza mirador. La superficie construida es de 901 metros cuadrados. El proyecto, del arquitecto Víctor Luna, tuvo un presupuesto inicial de ejecución material de 1.822.000 euros, más el beneficio industrial e impuestos correspondientes, pasando el total del proyecto a unos cinco millones de euros, pero las paralizaciones e intervenciones condicionadas por Cultura, más el desarrollo de la propia obra lo han incrementado hasta los siete.
Han sido varias las dificultades por las que ha atravesado el hotel. En primer lugar, la denuncia de la Junta de Andalucía recurriendo el acuerdo de la Junta de Gobierno Local de 7 de junio de 2005, por la que se le concedía la licencia de obras a la promotora Hotel Playa de Cotobro S.L. Esta denuncia se resolvió favorablemente a las tesis municipales, mediante sentencia de 4 de enero de 2008, por la que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Granada, consideraba "ajustado a derecho" el acuerdo municipal.
En paralelo, la aparición de restos romanos al excavar la cimentación, tanto en la parcela del solar como en la otra contigua, paralizaron la ejecución del edificio hasta que no se realizaron las correspondientes catas arqueológicas, para identificación de los mismos y su puesta en valor, principalmente el pozo y los restos de la vivienda romana e instalaciones contiguas.
Tras las recientes autorizaciones de Cultura, que ha coincidido con la solución de los problemas freáticos en la pasada primavera, se ha podido por fin impulsar el ritmo de ejecución hasta su conclusión, y desbloquear todos los conflictos pendientes.
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