Doce trabajadores de la central térmica de Iberdrola han sido despedidos sin que se les haya comunicado el motivo.
Se trata de los operarios de mantenimiento de la empresa Ditecsa, la cual tenía hasta ahora concedido el contrato para llevar a cabo estas tareas en la central de 1.600 megavatios propiedad de Iberdrola.
Los trabajadores, que mantienen la instalaciones mecánicas y eléctricas; es decir, casi toda la planta, se concentraron a las puertas de la térmica a primeras horas del lunes para presentar su disconformidad con la forma en que se ha procedido a su cese laboral, ya que ni la empresa ni Iberdrola como responsable de las instalaciones presentaron motivo alguno.
Esta situación es para los trabajadores muy extraña porque la plantilla de mantenimiento era “la mínima”; es decir, el mínimo que obliga la Ley del Ministerio de Industria, según la versión de los afectados.
Los empleados despedidos gozaban en algún caso de una antigüedad de diez años y de cinco los que menos, e incluso hay alguna situación en que un trabajador ha comprado una vivienda en la ciudad porque la empresa le aseguró trabajo “para 25 años o hasta jubilarnos incluso”, al tratarse de una plantilla indispensable. De ahí, los afectados se temen una maniobra de Iberdrola para adjudicar el servicio de mantenimiento a otra empresa con un menor coste económico y con contratos en precario para los nuevos trabajadores.
“El viernes nos dijeron que recogiéramos nuestras pertenencias”, explicaba un trabajador afectado, quien añadió que “una empresa como Iberdrola, que es tan grande, que es las más grande de Andalucía y nos tratan así…, eso no es normal. Cobran una subvención y nos echan de esa manera, sin avisarnos...”.
Un representante de la empresa Iberdrola se personó en la térmica el mismo lunes, pero no pudo aportar ninguna noticia esperanzadora a los trabajadores; es más, ni siquiera se dirigió a ellos, para limitarse a fotografiar el vehículo y a los trabajadores de este medio de comunicación, esgrimiendo que “era su trabajo”.
Aunque la empresa no ha presentado por ahora motivo alguno a estos despidos, todo apunta a la falta de actividad dentro de la propia central, donde ahora no funciona ninguno de los grupos que integran el ciclo combinado de la planta, lo cual no significa a todas luces, que tengan que cesar las tareas de mantenimiento y control de las instalaciones.
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