Según se manifestó en una de las reuniones, la circunvalación transcurriría por la zona norte del municipio, “llevándose por delante un importante paraje natural y turístico de la zona”, afirmó José María Romero, portavoz de los vecinos.
Entre los argumentos que esgrimió Romero, está el “destrozo de bosques centenarios, en lo que considero como un despropósito del gobierno y una aberración que no se puede consentir”. Romero afirmó que la construcción del nuevo trazado y la circunvalación “en absoluto era necesaria en estos momentos debido a la poca densidad de tráfico que tenía esta carretera”.
Por otra parte, en dicho encuentro, también se manifestó el impacto turístico que tendría esta obra con pérdida de sectores económicos importantísimos para la comarca de la Sierra como el cinegético, cárnico, agrícola y ganadero o el turístico. Romero afirmó que esta infraestructura es impensable en el siglo XXI en un territorio con la catalogación que tiene el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Por último en los argumentos en contra de este proyecto también se valoró el destrozo personal que se llevará a cabo en algunos casos como la destrucción de cortijos o incluso viviendas rurales donde residen ciudadanos de forma habitual y los minifundios históricos de carácter familiar que se encuentran en la zona.
Entre las medidas que se propusieron por este grupo de ciudadanos está la creación de una asociación de afectados, aunque el punto más importante del debate se produjo cuando salió a la luz la presentación de alegaciones. Los afectados se quejaron del poco tiempo que el Ministerio daba a los ciudadanos para presentarlas y la falta de información que había existido al respecto. José María Romero propuso que se formularan tres tipos de alegaciones: las personales de todos los afectados por el trazado en sus propiedades, una alegación de carácter local y conjunta por el destrozo medioambiental del proyecto y una alegación comarcal junto con otros municipios que tienen el mismo problema. Estas alegaciones deben de estar presentadas todas antes del 26 de febrero de 2009.
Además de las alegaciones, los vecinos propusieron solicitar al Ayuntamiento de Cortegana un pleno extraordinario para “obligar al equipo de gobierno municipal a que definiera una postura pública a este respecto”. Este pleno se llevaría a cabo de forma urgente los próximos días.
Entre las medidas, también se manifestó la necesidad de pedir a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía una postura clara ante este proyecto.
En la reunión también estuvieron presentes representantes del Partido Popular a nivel local. José Enrique Borrallo, portavoz de los populares en el ayuntamiento, afirmó que su partido estaba en contra de este proyecto, “sobre todo porque nosotros creemos que lo verdaderamente necesario para la comarca es la autovía que propusimos hace años que tenía un menor impacto medioambiental ya que transcurría fuera del parque natural”.
Por su parte, el alcalde de Cortegana, ha manifestado a este medio de comunicación que el Ayuntamiento del municipio aún no ha tratado este proyecto por lo que no se ha definido ninguna postura ante el mismo. En el caso del consistorio serrano, al igual que todos los ayuntamientos afectados, cuentan con un mes más que los ciudadanos para presentar las alegaciones.
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