Fuentes de AENA y de la Delegación del Gobierno en Andalucía confirmaron a Efe que se trataba de una falsa alarma. La alerta se produjo a las 16:15 horas tras una llamada a la DYA de Guipúzcoa en la que se avisaba de la colocación de una bomba en el aeropuerto de Sevilla, según explicaron a Efe fuentes de la Guardia Civil.
Al conocerse la amenaza, se desplazaron hasta las instalaciones del aeropuerto especialistas en desactivación de explosivos, mientras se cortó el acceso de los vehículos.
La Guardia Civil, tras inspeccionar la zona y descartar la existencia del artefacto, levantó el cordón y, poco a poco, el aeropuerto fue recuperando la normalidad.
De hecho, aeropuerto de Sevilla sólo registró el retraso de las salidas de vuelos durante la hora que duró el dispositivo activado ante la amenaza de bomba, pero no canceló ningún vuelo, mientras que las personas que se encontraban en la terminal fueron trasladadas a una contigua en desuso.
Fuentes de AENA aseguraron que el aeropuerto de San Pablo permaneció abierto y operativo en todo momento, aunque por precaución se retrasó la salida de vuelos hasta que se comprobó que el aviso era falso.
En ningún momento se han cancelado vuelos ni se han derivado a otros aeropuertos, mientras que a los pasajeros de tres aviones que acababan de aterrizar se les trasladó a un lugar seguro lejos de la terminal, donde permanecieron dentro de las cabinas hasta que la Guardia Civil ha levantado el cordón policial.
Por otra parte, las personas que se encontraban entre las 16:25 y las 17:35 horas en las instalaciones aeroportuarias fueron trasladadas a una terminal contigua que se encuentra en desuso.
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