Miles de personas, alrededor de 50.000, según sindicatos, se han echado este domingo a las calles de las capitales de provincia de Andalucía para protestar contra los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno de Mariano Rajoy y para solicitar "un cambio de políticas" del Ejecutivo central.

   En este sentido, la manifestación celebrada en Sevilla, que ha partido de la Puerta de Jerez y ha finalizado en la Plaza de San Francisco, ha contado en la cabecera con el secretario general de CCOO, Francisco Carbonero, el secretario de organización de UGT, Francisco Fernández, y el parlamentario y secretario de Economía del PSOE-A, José Caballos, entre otros.

   Alrededor de 50.000 personas, según sindicatos, se han manifestado por las calles de las capitales de provincia de Andalucía, mostrando su descontento con los presupuestos y políticas económicas y sociales de Rajoy al grito de "contra los recortes, huelga general" o "manos arriba, esto es un atraco".

   Carbonero, en declaraciones a los medios, ha afirmado que la jornada de protesta tiene que ser una reivindicación del trabajo "decente y digno", "contra el Gobierno de España y la imposición de las políticas neoliberales de Merkel, políticas absolutamente inútiles e incorrectas, generadoras de desigualdades".

   Según Carbonero, las políticas del Gobierno están creando "problemas de empleo, de protección social y de generación de desigualdad, y de empobrecimiento". "Se están arruinando los logros de 30 años y se está deteriorando la calidad democrática".

   Ante esto, "los ciudadanos y trabajadores tienes un gran problema, el empobrecimiento y la pérdida de igualdad de oportunidad". "Fijar el déficit como único objetivo es un error, mientras se impide el consumo y la demanda interna".

   "Este país no tiene un problema de gasto, sino de ingresos, por lo que la solución pasa por cambias las políticas económicas hacia las inversiones y una legislación fiscal mucho más progresiva", ha explicado Carbonero, para quien es "inadmisible que se les dé miles de millones a los bancos para resolver a los problemas y que los ciudadanos rescatamos sus problemas".

REFERÉNDUM

   Ante este panorama, según el líder sindical, "sólo nos queda la movilización para que Rajoy cambie de políticas y lleve a cabo un referéndum para que la sociedad decida sobre el cambio de políticas". "Es posible otras políticas sin que paguen siempre los mismos", ha resaltado.

   En este sentido también se ha manifestado el secretario de Organización de UGT Andalucía, Francisco Fernández, en declaraciones a los medios. Según el líder sindical, este domingo es "un día para decirle a Rajoy, él de la mayoría silenciosa, que tenga en cuenta a la mayoría de la población que le dice que no está de acuerdo con sus reformas".

   Por ello, Fernández ha expresado que le exigen a Rajoy que convoque un referéndum porque "es un fraude lo que está haciendo, pues no tiene nada que ver con su programa electoral".

"DIFICULTADES PARA LA CONVOCATORIA"

   "El Gobierno demuestra ser antidemócrata, recortando sólo derechos laborales y civiles", ha manifestado. Al hilo de esto, ha informado de que han tenido "dificultades" por parte de la Administración central, que también "quiere prohibir que nos manifestemos".

    En este sentido, ha explicado que la convocatoria ordinaria tiene que ser con diez días naturales de antelación, pero la de este domingo ha sido por la vía de urgencia, pues "no hace diez días que se presentaron el proyecto de los presupuestos". "La Administración central no entiende las urgencias", ha afirmado.

   Por otro lado, Fernández ha señalado que este domingo debe servir para protestar contra "la política social y económica del Gobierno, que sólo recorta y crea más paro".

   "Exigimos una política económica diferente con más inversión y el mantenimiento de las prestaciones sociales, con creación de empleo y con inversión productiva", ha añadido.

   De otro lado, ha indicado que este domingo se celebra el Día Mundial del Trabajo Decente, algo que "necesariamente" también hay que reivindicar en España, pues "con la reforma laboral los derechos laborales y la negociación colectiva están desequilibradas".