Banderas rojas que prohíben el baño ondean ya en varias playas de la costa de Cádiz debido a las fuertes corrientes y el intenso oleaje que se está registrando en la zona y que está provocando, de nuevo, el rescate de algunos bañistas, como ha sucedido en la playa de El Palmar, en el término municipal de Vejer de la Frontera, donde nueve personas han tenido que ser ayudadas a salir del agua por efectivos de Protección Civil.
Según han informado a Europa Press fuentes de los diferentes servicios de Protección Civil, en la costa de Chipiona ondea la bandera roja (peligro) en la playa de Las Tres Piedras mientras en el resto "de momento" está la amarilla (precaución).
En Rota, ondean también las banderas rojas en las playas de Nuevo Oasis, Peña del Águila y Pueblo Marinero. A su vez, en la playa de El Palmar, en Vejer de la Frontera, también han colocado la bandera roja y cada cinco minutos se advierte por megafonía del peligro que representa la mar aunque, según ha asegurado las fuentes, la mayoría de los bañistas "no hacen caso a las indicaciones", a pesar de que nueve personas han tenido que ser rescatadas en un escaso margen de tiempo, aunque ninguna de las intervenciones ha revestido peligro.
Mientras, en las playas de Cádiz capital, así como en las de La Barrosa y Sancti Petri, en Chiclana de la Frontera, Protección Civil ha colocado bandera de nivel amarillo y, de momento, no hay previsto subir el nivel de alerta. Según han precisado a Europa Press fuentes de Cruz Roja, en la tarde de ayer martes tuvieron que ser rescatadas un total de 52 personas por el mal estado de la mar en esta misma zona, que se encuentra en la actualidad prácticamente igual que la jornada de ayer.
Finalmente, en las playas de El Puerto de Santa María --La Puntilla, Santa Catalina, La Muralla y Vadelagrana-- ondea la bandera verde, aunque esperan que pueda elevarse el nivel de alerta cuando llegue la pleamar, prevista para las 19,30 horas, ya que produce un gran escalón que provoca mar de fondo.
Cabe recordar que ayer martes, cientos de bañistas tuvieron que ser rescatados de diferentes playas de la costa gaditana debido al estado de la mar, encontrándose todos en buen estado de salud.