Previamente a la entrega de premios, el acto fue presentado por el presidente maestre prior de la institución, José María Suárez Gallego, que hizo referencia a los inicios de esta singular orden gastronómica de Jaén y agradeció el importante apoyo de la Obra Social de la Caja de Jaén por su decidida apuesta en pro de la gastronomía tradicional a través de uno de los ingredientes más significativos como es el aceite de oliva. Los seis galardones, consistentes en un cristal con diseño vanguardista que simboliza la pureza del aceite mediante una gota trasparente en el que van representados los distintivos de la Orden, fueron entregados por diversos comendadores de la institución gastronómica.
En lo referente a los motivos que propiciaron la nominación de los galardonados ayer cabe destacar que al Vocal del Consejo General del Poder Judicial, Pío Aguirre, se le premió por su “excelente trayectoria profesional como magistrado y como presidente que fue de la Audiencia Provincial de Jaén”, según matizó Suárez Gallego.
En la consejera Micaela Navarro se quiso galardonar “su labor al frente de una responsabilidad de tan alto contenido y sensibilidad social actual para las ciudadanas y ciudadanos”, expresa el acta del jurado.
Por otra parte, en la Universidad de Jaén recayó el premio instituido por vez primera este año dedicado a honrar la memoria del profesor José Mataix Verdú, fallecido recientemente, catedrático de Fisiología, miembro de las Sociedades de Fisiología, Bioquímica, de la Academia de Ciencias Nutricionales Europea, del comité científico de la sociedad española de Nutrición y de la fundación para el Desarrollo y Promoción del Olivar y del Aceite de Oliva. Este premio se le concedió a la UJA por su apuesta en el campo de la investigación de la Dietética y Nutrición Humana, especialmente referida al aceite de oliva. En definitiva, “una apuesta de futuro que se verá reflejada en la futura Facultad de Medicina de la Universidad jiennense, a cuya petición, con este premio, se une la Orden de la Cuchara de Palo”, explicó Suárez Gallego. El galardón fue recogido por su rector magnífico, Manuel Parras Rosa.
Asimismo, la ciudad de Baeza fue premiada por ser una de las poblaciones en las que mejor se ha sabido poner en valor la Cultura del Olivo, a través de su gastronomía. Este premio tuvo un doble valor simbólico, ya que en este municipio está sepultado Pablo de Olavide, intendente del rey Carlos III que propició la llegada de los colonos que habitaron las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena. El premio lo recibió su alcalde, Leocadio Marín Fernández.
Por otro lado, el ceramista ubetense Francisco Martínez Villacañas, "Paco Tito", fue distinguido como Mayoral del Aceite de la Orden Cuchara de Palo, por sus muchos méritos como persona y como artista a la hora de divulgar la Cultura del Olivo y del Aceite. Recibió una réplica en miniatura de una vara olivarera elaborada en plata por un taller de orfebrería.
Y finalmente, al torero linarense José Fuentes, por su larga y exitosa trayectoria profesional en el mundo de la tauromaquia.
Los premiados fueron investidos como comendadores de la orden mediante la imposición de una esclavina propia de los primitivos monasterios, cuyo fundador fue San Antón, que también patrón de esta institución gastronómica. Asimismo, el alcalde de Guarromán, Antonio Almazán, como comendador honorario, les impuso la medalla de la institución, mientras que el maestro de armas, José María Rodríguez Sánchez les dio el espaldarazo ritual con una réplica artística de la Tizona elaborada en Toledo por el reconocido maestro armero
Zamorano. Además, recibieron un pergamino que acreditaba su condición de miembros de la Orden.
Posteriormente, el restaurante La Toja de La Carolina ofreció la tradicional cena en honor de los premiados, con un cuidado menú basado en una exaltación de nuestra gastronomía tradicional, interpretada con las claves de la más moderna cocina actual. En este sentido, el maestre prior, José María Suárez Gallego, matizó que "no existe modernidad sin una buena tradición", en clara alusión al debate dentro de las tendencias culinarias actuales.
Tras la degustación de las viandas, los premiados leyeron el conjuro de la Queimada, que prepara anualmente el comendador decano, José Rodríguez.
Este galardón de reconocido prestigio le ha sido concedido en anteriores ediciones a S.A.R. el Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón, quien lo aceptó en 1992; al Nobel de Literatura, Camilo José Cela, que fue investido en su casa de El Espinar en Guadalajara; al juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón; al expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez, a los toreros Enrique Ponce y Curro Romero; a los periodistas Carlos Herrera, Juan Espejo, Matías Prats y Maria Teresa Campos; al astronauta español Pedro Duque, por haber llevado productos gastronómicos españoles hasta cerca de las estrellas; y al actor internacional Antonio Banderas, entre otras personalidades.
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