La oleada de incendios que sufre estos días el Algarve portugués que arrasa especialmente el entorno de Faro y Tavira ha propiciado enormes columnas de humo que se están dejando ver muy directamente en la Costa y el Andévalo Occidental onubense.
De esta forma los cielos de Huelva se oscurecieron en la tarde de ayer siendo numerosos los ciudadanos los que llamaron a los servicios de emergencia alarmados por lo que parecía un incendio más cercano a sus casas. De momento, la frontera natural del Guadiana hace de cortafuegos para que las llamas no se extiendan a la provincia de Huelva pese a que algunos de estos incendios han sido vistos desde Ayamonte justo al otro lado del río, un poco más arriba del puente Internacional.
En este sentido, desde el Plan Infoca se ha corroborado que los incendios que calcinan el Algarve desde hace ya varios días no corren peligro de afectar a nuestra provincia, pese a que muchos de ellos, así como sus enormes columnas de humo, son bien visibles desde distintos puntos de la provincia onubense.
Ante las numerosas llamadas de alerta que se están recibiendo a través del teléfono único de emergencias 112 y al propio dispositivo INFOCA, la dirección del plan quiere trasladar un mensaje tranquilizador a la población onubense.
El dispositivo para la Prevención y Extinción de Incendios Forestales de la Junta de Andalucía, el Plan INFOCA, no está trabajando por tanto en las labores de extinción, no obstante si fuera necesario se activaría el protocolo de colaboración con comunidades limítrofes para apoyar con los medios de este dispositivo.
A lo largo de la presente campaña de extinción, así como en otras anteriores, el dispositivo INFOCA moviliza sus recursos, principalmente medios aéreos cuando las tareas de extinción de algún incendio que se produzca en otra comunidad así lo requiera.
Este año el dispositivo INFOCA movilizó medios aéreos para los incendios que se desarrollaron en la comunidad valenciana.
Por otra parte, cerca de 930 personas, entre ellos 600 bomberos, 165 vehículos, tres helicópteros y cuatro aviones, de ellos uno pesado Canadair procedente de España, combaten los fuegos del Algarve que duran ya varios días. La inmensidad del fuego es ya de tal magnitud que desde el miércoles una nube de humo cubre las localidades de Villablanca, Ayamonte, Isla Cristina, Lepe, Cartaya y gran parte del litoral. Pueblos como Ayamonte recibieron ayer una lluvia de partículas de árboles quemados que fueron arrastrados por el viento de poniente.
Decenas de fuegos de diferente importancia aparecieron a lo largo de toda la geografía lusa y llegaron a provocar el desalojo de viviendas, el corte de carreteras y la evacuación de población civil a pabellones polideportivos.
Cientos de bomberos, miembros de Protección Civil y personal militar participa en la extinción de las llamas, a las que se ha sumado medios enviados por las autoridades españolas.
Aunque todavía no existen cifras oficiales sobre cuántas hectáreas han sido quemadas, el diario Público apuntó ayer en su portada que sólo hasta ahora la extensión arrasada ya cuadruplica la perdida durante el verano pasado.
Uno de los principales focos está en el municipio de Tavira, en la región de Faro, donde el fuego que comenzó a arder hace ya casi 48 horas sigue activo en tres frentes y ya ha arrasado cerca de una tercera parte del territorio municipal, según los cálculos realizados por representantes del Gobierno local.
El propio ministro de Interior, Miguel Macedo, visitó de madrugada el puesto de coordinación instalado en la localidad y el alcalde de Tavira, Jorge Botelho, solicitó que sea declarada zona catastrófica.
