El exdirector general de Trabajo de la Junta Juan Márquez ha reconocido hoy a la juez Mercedes Alaya que "quizá no fue todo lo diligente que debería" en el control de las ayudas investigadas, pero "tenía muchos conflictos que atender" y llegaba a dar "instrucciones en los pasillos".
Abogados personados en la causa han explicado a los periodistas que el imputado y la juez Mercedes Alaya han subido hoy el tono de su discusión y la magistrada ha llegado a decirle: "su falta de conocimiento es llamativa" y "este hombre hace ver lo blanco negro".
"Usted hace el interrogatorio difícil y cansino", le ha espetado Alaya en otro momento, a lo que Márquez ha respondido: "O solo lo que usted quiere oír".
En otro momento, Alaya le ha reprochado que "el lenguaje no es su fuerte" y ha añadido la juez:"yo no soy inagotable".
Sobre las ayudas irregulares, Márquez ha reconocido que ordenó que se concediese una ayuda sociolaboral al exdelegado de la Consejería de Asuntos Sociales Juan Rodríguez Cordobés porque tenía derecho pero ha matizado que él no ordenó que fuese introducido como intruso en Calderinox.
