El tenista español David Ferrer alcanzó este jueves la tercera ronda del torneo de Roland Garros, segundo 'grande' de la temporada, tras derrotar sin problemas al francés Benoit Paire por 6-3, 6-3 y 6-2 en menos de dos horas de partido.
El de Jávea, salvo al inicio del choque, firmó un buen partido ante un rival, que eludió el habitual juego en la tierra batida e intentó jugar a un ritmo alto y sin apenas peloteos, lo que no surtió efecto ante la solidez del alicantino, que ya ha superado sus dos primeros encuentros con poca presencia en la pista y sin ceder ningún set.
Paire, verdugo de Albert Ramos en la primera ronda, mostró sus cartas desde el inicio, tomando muchos riesgos, lo que al final se convirtió en una gran cantidad de errores no forzados (51, por 36 'winners'), que fueron una losa difícil de levantar, mientras que 'Ferru', más paciente, esperó su oportunidad para confirmar su mejor y más regular tenis.
Así, el francés impuso su táctica y se puso 2-0, en lo que fue realmente su único momento de mando en el partido. A partir de ahí, el tenista español fue muy superior y le arrebató cinco saques de forma consecutiva para hacerse con el primer set y dejar bien encarrilado el segundo.
Y es que David Ferrer gozó de hasta 20 oportunidades de rotura, y aunque tampoco estuvo demasiado fino con su servicio en ocasiones, sumando cinco dobles faltas, salvo en el primer parcial, no cedió su saque en lo restante del choque.
Tras ganar el segundo set por 6-3, el sexto cabeza de serie en París rompió por sexta y séptima ocasión el servicio de Paire para cerrar por la vía rápida su choque, lo que certificó con un 6-2 final y a la sexta bola de partido. El holandés Robin Haase o el ruso Mikhail Youzhny será su rival para meterse en los octavos de final.