El ritmo del partido fue intenso, típico de una final donde nadie quería perder. El CBP fue poco a poco ajustando su ataque comenzando a anotar canastas y llegando al final del primer cuarto con una desventaja de tan sólo tres puntos (22-19). Los robos de balón y la intensidad bastaron para que en dos minutos el marcador diera la vuelta. El Palo lo intentó pero se encontró con unas jugadoras que no dejaron escapar la diferencia de puntos haciéndose con un campeonato tan trabajado como justo.
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