Casi un tercio, en concreto un 27,2%, de la población activa andaluza sufre estrés derivado de la actividad profesional, según los datos de la I Encuesta Andaluza sobre Condiciones Laborales, un estudio realizado por el Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales, que presentó ayer en el Parlamento el consejero de Empleo, Antonio Fernández.
En su intervención en comisión, el consejero explicó que la encuesta contiene un apartado dedicado a las enfermedades profesionales y afecciones de la salud atribuidas al desempeño profesional, donde se apunta un 27,2% de los entrevistados aseguraron sentir estrés por su ocupación, y un 37% ha tenido alguna vez síntomas psicosomáticos de etiología laboral, como sensación de cansancio, dificultades para conciliar el sueño o dolores de cabeza.
Entre las enfermedades profesionales más citadas se encuentran las dolencias osteomusculares (el 78%), aunque el 79,4% manifiesta que el trabajo no está afectando a su salud, frente a un 18,4% que manifiesta lo contrario.